Falleció Humberto Maschio, gloria del fútbol argentino
Ganó la Copa Libertadores como jugador en Racing y como entrenador en Independiente. Fue parte de una de las mejores delanteras de la Selección Argentina y jugó un Mundial para Italia. Maschio fue un delantero y en el final de su carrera volante talentoso de los años 50' y 60', que contaba con una exquisita pegada y tenía una gran inteligencia táctica. Fue la gran figura del "Equipo de José", una de las mejores formaciones de la historia del fútbol mundial.
Humberto Maschio, campeón de Copa Libertadores con Racing como jugador e Independiente como entrenador, falleció luego de estar varios días internado. La triste noticia fue confirmada por la cuenta oficial de la “Academia”
“Los que dejan huella jamás quedan en el olvido...” escribió el club en un comunicado oficial
El exdelantero poseía una insuficiencia renal y sufrió un accidente en su casa que derivó en la internación. En la caída, el ídolo racinguista sufrió un golpe detrás de la nuca y otros abajo de la boca. Se encontraba en terapia intensiva y su estado de salud era complicado, según le comentaron sus seres más cercanos a este portal. Tenía comprometidos los riñones y el corazón por lo que el desenlace.
Maschio, una gloria del fútbol argentino
Dueño de una exquisita pegada y gran inteligencia táctica, “El Bocha” nació el 20 de febrero de 1933 en Avellaneda.
Maschio comenzó su carrera en Arsenal de Lavallol y, luego de destacarse en Quilmes, llegó a Racing en 1954, debutando oficialmente (ante Chacarita) en mayo de ese año. En su primera etapa en el club, se desempeño como delantero, donde llenaba las redes rivales con gran destreza.
En 1955 fue el goleador del equipo con 18 tantos. Su extraordinaria performance lo llevó a Selección Nacional que disputó los Panamericanos de México 1955, donde la Selección Argentina alcanza el campeonato.
Dos años después, integró (junto con Corbatta, Angelillo y Sivori) una de las mejores delanteras de la historia de la Selección Nacional: “Los Carasucias”, con quienes obtuvo la Copa América de 1957 aplastando en la final a Brasil (equipo que al año siguiente sería campeón mundial) con un contundente 3 a 0.
Además, con seis conquistas, “El Bocha” fue el goleador de aquel torneo. En total, en la Selección jugó 12 encuentro donde convirtió la misma cantidad de goles.
Luego, emigró a Italia donde se destacó como jugador más estratégico y de toda la cancha en clubes como Bologna, Atalanta, Inter (donde fue campeón) y Fiorentina (donde ganó una Copa Italia). También tuvo el privilegio de integrar la Selección Italiana que disputó el Mundial de Chile en 1962 donde, además, llevó la cinta de capitán.
En 1966, tras ser llamado especialmente por Pizzuti, volvió a La Academia para convertirse en el gran armador de aquel “Equipo de José”. Aquí aportó su experiencia, pausa y conducción para las consagraciones en el campeonato del ’66, la Copa Libertadores 1967 y la Intercontinental del ’67. Fue como un director técnico adentro de la cancha.
Finalmente, se retiró en el club en 1968 completando, entre sus dos etapas, 139 partidos disputados en los que convirtió 44 goles.
El tiempo también lo hizo convertirse en técnico, etapa en la que se destaca su paso fugaz por la Selección Argentina en 1969 y sus dos ciclos como técnico de La Academia; la última en 1999-2000, en dupla con Gustavo Costas.
Al poco tiempo tuvo el desafío de ser DT de Independiente, donde consiguió la Copa Libertadores y la Interamericana en el año 1973. A eso se suma que fue quien hizo debutar en cancha a Ricardo Enrique Bochini, máximo ídolo del “Rojo”.
Sin embargo, en más de una oportunidad se reconoció como hincha de Racing. "Es mi segundo hogar. Mi segunda esposa me dijo 'vos lo querés más a Racing que a mí' y yo le dije 'no, te quiero igual' en el sentido de mirá cuánto te amo y me quería matar. Es completamente distinto, pero yo lo amo a Racing", manifestó.