El último gran ascenso de equipos a Primera División dejó fuertes cuestionamientos por parte de muchos equipos históricos de Primera que vieron cómo nuevos clubes accedían a la máxima categoría, pero prácticamente carecían de instalaciones, insfraestructura, recursos y no cumplían ni por asomo las funciones sociales de sus ahora pares.

La bronca fue creciendo durante el último años y más de un dirigente, puertas adentro de AFA, despotricó por considerar que equipos como Patronato, Sarmiento, Temperley no tenían ni infraestructura, ni masa solitaria que respalde su lugar en la elite del fútbol argentino. Cuenta el capitán de un equipo que en la cancha de Patronato prácticamente no se ve de noche porque el sistema de iluminación es deficiente. Ni que hablar las recurrentes quejas de la tv. Para los equipos de producción suele ser toda una odisea trasmitir partidos en muchos estadios por las luces y la carencia de obras civiles menores para poder hacer algo tan básico como colocar una cámara y que no se mueva. 

Ahora, Andrés Fassi, presidente de Talleres en una entrevista con La Nación parece, de a poco, blanquear esta grieta entre chicos y medianos. También vicepresidente de Pachuca, al ser consultado por el saneamiento de la Liga mexicana, Fassi asegura: "En México vivimos una refundación cuando nos juntamos los dueños de los clubes y coincidimos en que queríamos otra liga, queríamos otro fútbol. Viajamos por todas las ligas más poderosas del mundo y vimos qué podíamos incorporar para crecer. Finalmente, se separaron la Liga de la Federación. Hoy México tiene una Liga saneada, donde el club que tiene deudas no puede competir y para ascender a esa Liga, debés cumplir con ciertos estándares, y no sólo el deportivo. ¿Qué estándares? Si no tenés un estadio con capacidad para 20 mil personas sentadas, si tu club no demuestra un compromiso social, si no trata sus inferiores como un objetivo prioritario y no cumple con el fair play económico, no tiene ninguna chance de ascender. Este es un buen momento para poner reglas en el fútbol argentino”.

Al ser consultado por cuáles son los estándares a cumplir para poder acceder a la Primera, Fassi se explaya: "Primero, no podemos ser 30 equipos ni 28, así no podemos competir contra las mejores ligas del mundo. Deben ser 20 o 22, no hay capacidad para más. Y habrá que empezar a cumplir una serie de puntos: todos tenemos que tener divisiones inferiores, escuelas de fútbol y centros de desarrollo. Y fair play financiero, viejo. ¿Vos debés? No podés inscribir jugadores. 'Y desciendo', te dicen. ¡Es que tenés que descender porque no tenés la capacidad para estar en Primera! Es muy injusto lo que acaba de suceder: descendió algún equipo con deuda 0 y otros se quedaron en Primera con más de 100 millones de pesos de deuda. Entonces, e insisto, definamos los parámetros: ¿un equipo de la B Nacional con un estadio para 6000 espectadores puede ascender? Definitivamente no. ¿Un equipo que está en la B Nacional y no tiene inferiores, puede ascender? No. ¿Un equipo de Primera que no cumple con el fair play financiero puede conservar la categoría? No, no puede".