Flor Chiribelo: "En cuarentena la vida del deportista tiene que seguir igual"
La arquera y capitana de River dialogó con Doble Amarilla en su cuarentena. Contó que es “optimista” en esta situación y se encuentra cómoda en estos días, aunque le preocupa “la economía y la gente que pasa hambre”. Además, habló del seguimiento que tiene el equipo por parte del club y las charlas en la plataforma ‘Zoom’. También realizó un balance del torneo del equipo y expresó: "Es necesario establecer ya un nuevo objetivo para trabajar".
María Florencia Chiribelo es la arquera y la capitana de River. Las chicas ‘Millonarias’ finalizaron en la cuarta posición en el primer torneo profesional de AFA, con 38 puntos, en un torneo que fue atravesado por la pandemia del coronavirus, en el cierre de la primera etapa. En cuarentena, dialogó con Doble Amarilla y contó cómo atraviesa estos días.
Además, destacó que continúa entrenando y siguiendo las recomendaciones nutricionales que les envía el cuerpo de trabajo de River, y habló de la vida del deportista, que “debe continuar de la misma manera”. Por otro lado, reveló cómo lleva las charlas por Zoom y detalló su experiencia: en el club, las utilizan para entrenar y también para dialogar tanto con nutricionistas y psicólogos.
Por otro lado, contó sus inicios en el fútbol, casi de casualidad y “por accidente”, tal cual lo relata Florencia. Además, se refirió a su llegada al club de Núñez y aseguró: “Tengo por delante una gran responsabilidad, estoy feliz desde el día que me pidieron que me quedara y de todo el camino que recorrí dentro del club”.
- Doble Amarilla: ¿Cómo estás pasando estos días de cuarentena?
- Florencia Chiribelo: Bastante optimista, la estoy pasando bastante bien. No tengo posibilidades de estar en mi casa normalmente, salgo muy temprano y vuelvo muy tarde de lunes a viernes, y los fines de semana a veces me toca entrenar, o jugar, así que no podía disfrutar de momentos de paz y soledad que me dio esta cuarentena. Yo, por la cuarentena, feliz, si es por mí que continúe y lo único por lo que deseo que termine es por la situación económica del país y de la gente que está pasando hambre. Pero, si fuese por el resto, feliz.
- DA: ¿Qué seguimiento tienen por parte del club, les acercaron planes nutricionales?
- FC: A medida que fue pasando el tiempo nos fuimos adaptando. Primero estuvimos un tiempo entrenando solas y cuando surgió esto de la plataforma Zoom empezamos a hacerlo desde ahí. A través de un grupo de Whatsapp nos comunicamos entre todos, porque están los profes y hablamos de todo. Desde los ejercicios que tenemos que hacer, videos que teníamos que mirar para analizar. La nutricionista nos enviaba tips de alimentación, cosas a tener en cuenta, que no hay que hacer, y apoyarnos en distintos nutricionistas que conocen también del tema, derribando mitos y cosas que a veces uno cree en cuanto a la alimentación y que a veces no son ciertas… Te abre un poco la cabeza en ese sentido, y a partir de esta semana, empiezan también las charlas por Zoom con la nutricionista, con el psicólogo… El sistema se fue adaptando a esto, que es la mejor forma de comunicarnos.
- DA: ¿Tienen plan específico?
- FC: Sí, hay un plan, empezamos también con un control de peso, la jugadora por lo menos una vez por semana tiene que pesarse y pasarle a la nutricionista para que lleve un control y ver cómo van los cuidados en la cuarentena, que no es fácil para ninguno y hay que tener mucha constancia. Creo que todo el mundo engordó en esta cuarentena, je. Ellos hacen lo mejor desde su lado y obviamente necesitan la colaboración de las jugadoras.
- DA: Es bueno lo que contas, que estén presentes, más porque este es un momento en el que hay mucha incertidumbre y ellos te guían…
- FC: Sí, claro. Es fundamental no dejar nada librado al azar porque ahí vienen los problemas. No pueden decirnos ‘chicas, entrenen, nos vemos a la vuelta’, porque después volvemos con kilos de más si no tenemos un seguimiento. La vida del deportista tiene que seguir igual. Yo me fui de vacaciones y comí un churro, y casi lloro, lo comí con culpa y después pensé que tendría que haberlo disfrutado… Estés donde estés, en la situación que te encuentres, no dejás de ser deportista y, por lo tanto, te tenés que cuidar.
- DA: ¿Cómo llevas adelante los entrenamientos?
- FC: Yo los hago en casa, por suerte tengo una casa grande y también tengo materiales porque me gusta entrenar. Tengo barra, pesas, pelota medicinal, creo que tengo todo lo que necesito; podría tener más, sí, pero con lo que tengo me alcanza para mantenerme en este tiempo. Entreno todos los días, porque tenemos que entrenar todos los días, salvo los domingos, que es el único día que tenemos descanso. Algunos días se hace un poco difícil, a veces una está más cansada, pero se sigue porque hay que estar convencida. Está bien entrenar con alguien. Venía un poco renegada con el tema de ‘Zoom’ porque no estaba acostumbrada, pero hasta que empezamos a hacerlo y sentí que en realidad estaba bueno tener del otro lado a alguien que te esté mirando y te dé ánimos, que te aliente para entrenar, así que estaría bueno hasta hacerlo todos los días. De alguna manera te sentís acompañada, pero la usamos día por medio y los otros días entrenamos solas.
- DA: Todo es cuestión de adaptación, ¿qué es lo que sentís que te falta más de los entrenamientos?
- FC: El puesto de arquera es bastante solitario, así que entreno con Mel (Melipil), a veces nos acompaña Lara, que es de las más chiquitas. Lo que más extraño es poder hacer lo puntual de mi puesto, porque no puedo hacer caídas desde que empezó la cuarentena, no me puedo tirar, hay cosas que no puedo hacer. Tampoco tengo a nadie que patee, así que me tengo que arreglar con la pared, y hay cosas que se dificultan practicarlas. Creo que lo que más necesito es poder entrenar lo mío, como punto uno. Después, extraño estar con mis compañeras, pararme en el arco, hacer alguna jugada o remata que también me falta.
- DA: ¿Qué hacés en tu tiempo libre?
- FC: Desde que empezó la cuarentena tenía un montón de cosas pendientes en mi casa. Tengo una casa bastante grande y un montón de cosas para ordenar, tenía un placard para cambiar, así que compré uno nuevo, lo armé en tres o cuatro días, tiré millones de papeles… Usé mi tiempo libre para hacer todo eso, y puse mi casa en orden en un montón de cosas que en lo diario y en la rutina era imposible hacerlo. A veces también leo, escucho música, si tengo que trabajar, hago mi trabajo, pero siempre trato de hacer algo. En esta cuarentena si dormí tres siestas fue mucho. Traté de ocupar mis días en algo.
- DA: ¿Continuás trabajando normalmente?
- FC: Trabajo, no normalmente, porque trabajo de lunes a viernes, pero a partir de la cuarentena empecé a trabajar día por medio, más horas en una empresa. Entonces hay días que prácticamente no estoy en mi casa, salgo temprano y vuelvo a las 18, así que ese día lo tengo completo: llego, entreno, como y miro alguna película, y después me voy a dormir. Al otro día trato de levantarme temprano, entrenar, almuerzo y después hago ciertas cosas y se me va el día volando.
- DA: ¿Cómo fueron tus inicios en el fútbol?
- FC: Comencé a jugar con una amiga en un lugar en el que se anotaban en listas y cuando completaban el equipo, jugaban. Yo no jugué nunca a la pelota, eso fue a los 27 años, pero una amiga que me dio el trabajo me llevó, porque faltaba una chica. La otra semana también fui, y me paré en el arco, porque es un lugar en el que me sentí más cómoda, no tenés que correr, te parás y sacás la pelota… Visto así, me parecía sencillo, así que para mí era lo más fácil en ese momento, pero hoy no sé si te diría que es lo más fácil. La segunda vez me habló una de las chicas y me invitó a jugar un torneo de fin de semana, yo les dije ‘no tengo idea’, pero me dijeron que le gustaba como jugaba, yo le ponía ganas porque no me gusta perder ni a la bolita, y fui. Jugamos juntas dos o tres torneos y después en esos torneos te encontrabas con diferentes chicas que jugaban bien a la pelota, me fui relacionando con gente del fútbol, me invitaban a torneos y conocí a Patricio Luna, a quien le ofrecieron dirigir en Ferro. Me dijo: “Necesito arquera, venite”, y yo contesté que no estaba preparada, pero me habló, “si no querés jugar en algún momento yo no me voy a enojar”, y así fue que empecé en Ferro, al año me fui, y estuve otro año casi sin club. Después me probé en River. Pero yo empecé a jugar al fútbol por accidente.
- DA: Y ahora estás atajando en River, uno de los arcos más importantes en el país…
- FC: Eso fue parte de mi historia y es super extraño, para quien se lo cuento y para mí, mi familia y amigos que haya pasado esto es muy loco. No sé que hubiera sido de mi si empezaba de más joven, capaz estaría en otro lado, o no. Pero ahora tengo por delante una gran responsabilidad y feliz desde el día que me pidieron que me quedara y de todo el camino que recorrí dentro del club.
- DA: ¿Qué balance haces del desempeño de River en este primer torneo profesional?
- FC: Ha sido un torneo muy bueno, más allá de que no lo comenzamos muy bien, hemos tenido esa derrota con Boca, creo que tuvimos algún que otro partido que no pudimos resolver, ha sido un torneo bueno, había muchas cosas por mejorar. Hay un sistema de juego que el entrenador viene trabajando desde hace bastante, y a medida que se van cambiando fichas, como jugadoras que se van, vuelven, hay que adaptarlo y el fútbol está consiguiendo un gran nivel en muchos aspectos que antes no se tenían en cuenta. La jugadora también tiene que adaptarse en temas como la alimentación, tener un psicólogo, entendiendo que la psicología es una parte muy importante en un equipo y en el nivel profesional de la forma que se compite, muchas veces la cabeza es todo, porque podés ser el mejor del mundo, pero si tu cabeza quiebra probablemente no llegues a ningún lugar. Creo que el balance es bueno, siempre hay un montón de cosas para mejorar.
- DA: ¿En qué aspectos crees que mejoró?
- FC: River tiene un gran equipo, ha mejorado muchísimo en la velocidad de juego, en la marca, cuando se pierde una pelota, en entender situaciones de juego y en progresar en la parte de comprender y ver en qué te equivocaste, en qué no, por qué pasó esto y cómo debés corregirlo, y pensando en qué se modificaría. Es un crecimiento constante, veníamos por un buen camino. Ahora, con la decisión de AFA, habrá que resetear de nuevo, ponerse nuevos objetivos, porque el objetivo era ganar el torneo y encima se fue todo de golpe. Sí o sí es necesario que ya te pongas un nuevo objetivo y que lo que continúe sea en pos de eso nuevo, porque ya lo viejo no te sirve. Hay que seguir adelante y prepararnos para el nuevo torneo.