Jugó en Boca y Racing, y regresó al fútbol argentino a un equipo inesperado
Un talentoso futbolista que, entre otros clubes, brilló en la "Academia" y el "Xeneize", es el flamante refuerzo de un equipo del Torneo Apertura.
Uno de los refuerzos más inesperados llegó sobre el cierre del libro de pases del fútbol argentino. Y se dió cuando Diego González puso el gancho para firmar su contrato con San Martín de San Juan, donde también milita su hermano Sebastián.
El “Pulpo” lleva adelante una carrera extensa y con varias consagraciones en el lomo desde su aparición en el “Granate”. Fue multicampeón con Boca y también sumó una estrella internacional con Lanús, jugó en otro grande como Racing y también dejó su sello en una época dorada de Santos Laguna de México.
El tiempo que estuvo el “Pulpo” en la Boca fue mucho menor de lo esperado. Pese a que llegó como un refuerzo top para ganarse el puesto de volante central, las reiteradas lesiones hicieron que pierda mucho peso dentro del campo de juego. En sus cuatros años (llegó al club tras su paso por Racing), solamente jugó 44 encuentros y anoto solamente tres goles (Central Córdoba, Platense y Arsenal).
En cuanto a títulos, logró levantar la Copa Diego Maradona (2020), la Copa Argentina 2019/20, la Copa de la Liga 2022, la Liga Profesional 2022 y la Supercopa Argentina 2022.
Diego González llegó a San Martín de San Juan
Hizo goles, dio vueltas olímpicas y logró mucho de lo que había soñado de niño, cuando daba sus primeros pasos en la baby de Unión de Rafael Calzada. Pero le faltaba algo a sus 37 años: compartir vestuario, camiseta y cancha con su hermano Sebastián, el "Pulpito" para todos en Concepción.
Ese anhelo que se fue forjando mientras ambos compartían una misma profesión, aunque siempre en escenarios distintos, se concretó recién la semana pasada, cuando Diego se puso la pilcha verdinegra.
En tierras cuyanas, cruzando miradas de complicidad con el referente de San Martín, el mayor de los González puso primera. Y lo hizo con un mensaje claro: "No vengo a ser ídolo, vengo a la casa de mi hermano, a aportar mi granito para que el club siga creciendo", declaró a Tiempo de San Juan.
"Es algo que me agarra en una etapa de mi vida en la cual me quedaban pocos sueños por cumplir en lo futbolístico. Y uno de esos era compartir plantel con mi hermano", completó.