La caída del clásico dejó huellas en Lanús: la ciudad amaneció con pasacalles contra Russo
El centro de la ciudad del sur del GBA se despertó llena de mensajes contra el presidente Grana. Sus hinchas le exigen refuerzos y le tildan de ser la “vergüenza del barrio” por pedir los puntos en el escritorio. La crisis que golpea a la dirigencia y ¿afecta los planes a futuro de Russo para ser intendente?
Las repercusiones de la caída en Peña y Arenales y el reclamo de los puntos realizado en AFA sigue siendo el principal tema de conversación en Lanús. Este miércoles el centro de la ciudad amaneció con decenas de pasacalles en contra de Nicolás Russo, presidente del club. ‘Sos la vergüenza del barrio. Los partidos se ganan en la cancha. Trae refuerzos’ rezaban las pancartas que se pudieron ver en diversos sectores céntricos.
Los pasacalles fueron ubicados en lugares transitados por los vecinos (en su amplia mayoría, hinchas y socios del club) como ser el ingreso al velódromo, las avenidas 9 de Julio, 29 de Septiembre e Hipólito Yrigoyen, el ingreso al club y el frente de la Municipalidad local.
Impacto político
Justamente, el impacto que tiene esto en la proyección política de Russo es muy grande. Otrora candidato a primer concejal, ‘Nicola’ quiere ser candidato a Intendente del municipio.
Los constantes contratiempos que está teniendo en el club (usado como trampolín para su campaña política, algo que le recriminan mucho puertas adentro) le estarían quitando mucho espacio en la carrera electoral. La actualidad del club y la imagen que está en baja, hace que en el Frente de Todos tenga dudas en su postulación.
A su vez, en las últimas semanas se supo de la candidatura de Omar Galdurralde, hombre fuerte de Loterías y Casinos de la Provincia y apadrinado por otro hombre fuerte del peronismo en la provincia como Martín Insaurralde. Hay quienes no descartan que Edgardo Depetri (candidato a intendente en 2019) quiera volver a presentarse en el distrito.
Las huellas de la derrota en el clásico, más sus zigzagueos constantes en el mundo del fútbol, la interna en el club y las ambiciones políticas que se ven debilitadas generan un combo muy fuerte contra el presidente granate, que vive horas clave para su futuro inmediato: en diciembre debe dejar de ser dirigente del club porque el estatuto le impide seguir ocupando un cargo y la proyección en la política local se ve cada vez más debilitada.