El partido entre Rosario Central y Racing Club de Avellaneda, pactado originalmente para este sábado a las 19:30, se vio envuelto en una situación ciertamente insólita.

Por intermedio de un comunicado oficial, la institución rosarina aseguró que, por motivos de seguridad, tanto la Liga Profesional de Fútbol como el Ministerio de Justicia y Seguridad de la provincia de Santa Fe habían resuelto modificar la programación del juego ante la “Academia”.

“Se dispuso que el partido ante Racing en el Gigante, comience a las 17, y no a las 19.30 como estaba programado en un principio. El pedido, aceptado por LPF, obedece a que los encargados de la seguridad pretenden que el partido finalice con luz natural”, había informado el club presidido por Gonzalo Belloso.

Horas después, el ente liguero desmintió este comunicado de Central a través de sus redes sociales: "A raíz de trascendidos, la LPF aclara que en ningún momento se cambió el día y horario del partido entre Rosario Central y Racing Club , programado para el sábado 30 de noviembre a las 19.30".

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La contrarrespuesta del club rosarino a la LPF

Ante esta situación, y en concordancia con la réplica de la Liga, Central emitió un comunicado para aclarar que la programación del partido se mantendrá de acuerdo a lo estipulado en primera instancia.

"Comunicamos que el horario definitivo del partido del día sábado ante Racing es 19.30 hs", señaló el cuadro de Arroyito. En tanto, indicó: "Asimismo, debido a la clausura de la Popular Norte para el partido ante Racing, este sábado aquellos socios/as que cuentan con su abono a Popular (sea Norte o Sur) deberán ubicarse en la Platea Cordiviola". 

Por último, puntualizó: "Esta resolución busca que aquellos que adquirieron oportunamente su abono cuenten con un beneficio y mayor comodidad, así como también que exista una mayor disponibilidad para los socios que deseen reservar su ubicación en la Popular Sur".

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Un partido que despertó especial atención en las autoridades de seguridad

El encuentro entre Central y Racing será el primero desde el doble crimen de Bracamonte y Daniel “Rana” Atardo, quienes fueron acribillados luego del encuentro en el que el “Canalla” cayó 1-0 ante San Lorenzo el pasado sábado 9 de noviembre, por la vigésimo segunda fecha.

En las últimas semanas, la dirigencia de Rosario Central ya había limitado el horario de uso del predio que es conocido como Caribe Canalla los días miércoles y jueves, en los que habitualmente se reúne la barra.

Todas estas medidas preventivas son debido al temor de que la agresividad entre las barras bravas del equipo rosarino siga en aumento. Este será el penúltimo partido como local para Central en el año. El último será recién en la fecha 27, ante Belgrano de Córdoba.