La situación deportiva en el "Rojo" se vuelve cada vez más insostenible: quedó a tres puntos del último
El arranque del Torneo de la Liga Profesional de Fútbol dista bastante de lo que se esperaba y potencia aún más la crisis institucional del club de Avellaneda. Y las reacciones van en ese sentido luego de la derrota ante Defensa y Justicia.
No hay caso, Independiente no levanta cabeza. El conjunto de Avellaneda profundizó su crisis futbolística e institucional con una derrota por 2-1 como visitante ante Defensa y Justicia. Los dirigidos por Claudio Graf, entrenador interino del 'Rojo' tras la salida de Eduardo Domínguez, no hizo pie en Varela, con un primer tiempo en el que fue sumamente superado por su rival.
La derrota, la cuarta en las últimas cinco presentaciones por Liga, no hizo más que agregarle condimentos a una situación institucional que cada vez se vuelve más insostenible. Y a la cual declaraciones como las de Hugo Moyano, solo le agregan más leña a un fuego que amenaza llevarse todo a su paso.
Desde que Hugo Moyano asumió como presidente de Independiente allá por Julio de 2014, el plantel profesional vio desfilar a 9 entrenadores y 4 interinatos: una montaña rusa a la que se subieron Omar De Felippe, Jorge Almirón, Mauricio Pellegrino, Gabriel Milito, Ariel Holan, Sebastián Beccacece, Lucas Pusineri, Julio Cesar Falcioni y el renunciante Eduardo Domínguez.Otra muestra de que el nulo proyecto futbolístico que ha tenido el 'Rojo', con el oasis de la era de Holan en el medio.
En medio de este clima, con un presidente que dice, a viva voz: "No están las condiciones dadas a mi entender para que haya elecciones, pero si la junta decide que se pueden hacer, se van a hacer", cuando la masa societaria reclama poder expresarse en las urnas, o que admite que el club no debe dinero cuando la catarata de juicios y embargos que pesan sobre la institución roja, Independiente llegará a una Asamblea (el próximo viernes) que promete ser por demás caliente. Entre lo futbolístico y lo institucional, el infierno no está nada encantador...