Lanús, los secretos de un proyecto que se cimenta en sus inferiores
El club vive un gran presente y empezó a construirlo después de perder la Copa Libertadores 2017. ¿Cómo lo hizo? "Doble Amarilla" se mete a fondo en la cocina "Granate" y explica porqué el actual plantel de Zubeldía tiene 19 jugadores formados en sus divisiones inferiores, el club es el que más aporta a la Sub 17 y fue Tetracampeón en juveniles. Con esas armas, Lanús lidera la Superliga, está en semis de Copa Argentina y se reinventó cuando le auguraban una dura caída.
(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Cuando Gremio se llevó la Copa Libertadores 2017 de la cancha de Lanús, muchos pensaron que eso sería un buen punto de partida para una institución de barrio que, hace rato, había roto el techo de cristal de llegar a ser una conquista internacional. Diez exactos años después de su primera conquista, Lanús estaba a los pies de la Copa Libertadores, nada más ni nada menos.
Mientras algunos - o varios- pensaban que ese sería una nueva base, para los dirigentes de Lanús y, en especial, para Nicolás Russo, ese fue el punto de inflexión. “En 2017 después de llegar a la final, nos dimos cuenta que ese plantel era inviable de sostener y que había que volver a las fuentes y reconstruir la identidad Granate. Los indicios estaban, en las Selecciones juveniles, y los resultados que se lograban”, puntualiza Russo, en diálogo con “Doble Amarilla”.
“En aquel momento se tomó una decisión acertada y Luis que es un hombre de la casa que entiende el proyecto, más allá del objetivo, ayuda a cumplir”, completó el Presidente de la institución.
Al respecto, Mariano Arcorace, Presidente del Fútbol Juvenil de Lanús, que tiene bajo su órbita la pensión también, puntualiza: “En Lanús hay que fabricar los jugadores en función de la primera División" Y ejemplifica con un caso reciente: "Bernabeí, por ejemplo, siempre fue lateral por izquierda, ocupó esa posición en 5ta, 6ta, 7ma. Cuando Luis lo llevó a primera de Pretemporada y, después, lo bajó a Reserva, le pide al Dt de reserva que lo ponga como extremo. En esa posición jugó en Reserva con Vélez, Patronato y Central. Pasó que se lesionó el Laucha y tuvo que jugar él en Córdoba. Debutó con un gol. Jugó muy bien contra Boca y contra Independiente por Copa Argentina. Lo ha hecho bien, además por reemplazar a quién reemplaza en primer lugar.”
Y, para muestra, basta un botón. Pero toda esa coordinación es algo buscado. En Lanús hay una mesa chica que está integrada por Maxi Cuberas, ayudante de campo de Luis Zubeldía, el DT de la Reserva, Rodrigo Acosta (hermano del Laucha), Lucas Rodríguez Pagano (coordinador del Fútbol Juvenil) y Maxi Velázquez (Subcoordinador). Velázquez fue el capitán, aquella noche ante Gremio. Como dato aleatorio de lo que es el sentido de pertenencia y el proyecto por sobre los nombres.
Ahora bien, ¿qué se discute en esa mesa? Explica Pagano, en diálogo con “Doble Amarilla”: “Más que nada nosotros somos el nexo entre Reserva y Primera. Está Rodrigo y Maxi Cuberas y Maxi Velázquez y Luis. Nosotros escuchamos las necesidades de la Primera y le mandamos al chico. Muchas veces pasa que ellos ya lo conocen, porque trabajan en la semana con las juveniles”.
“Luis por semana pide dos equipos completos de fútbol juvenil para entrenar, hace mover a Primera contra Fútbol Juvenil y a Reserva contra fútbol juvenil. Luis los ve y los ve a diario, semanalmente”, informa Arcorace. Ese fue el caso de Bernabei, un ilustre desconocido, que debutó sin siquiera haber ido al banco. Un chico al que Zubeldía ya conocía muy bien.
Arcorace saca pecho con el buen andar de Lanús en las juveniles, dónde se llevó los títulos en 6ta, 7ma, 8va, y 9na de los torneos de inferiores de la Superliga en su edición pasada: “Nosotros tenemos como meta fijada, que los campeonatos reales son que los chicos jueguen en Primera”. En ese sentido, vale remarcar que de ese proceso que fue de agosto de 2018 a agosto de 2019, Lanús promovió a Primera a Valenti, Bernabei y De la Vega.
Pero, este proceso que es exitoso en la cancha, primero tiene un periodo previo, en el que el verde césped no tiene mucho que ver: primero, el acogimiento que hace el club del chico, la contención que le ofrece y cómo le marca los pasos. Al respecto, Russo advierte que el club tiene “un proyecto incluye un trabajo integral en infantiles, juveniles y Primera, no sólo para formar un jugador, si no para formar una persona” y agrega el mandamás de la Institución del Sur: “El proyecto contempla que entre el 80 y 90% de los entrenadores sean ex jugadores del club y una cantidad de dirigentes cercano a los 100 que acompañan a los chicos desde que ingresar al club hasta que llegan a Primera”.
Según pudo saber “Doble Amarilla”, hoy, en la pensión de Lanús, viven 50 chicos, 42 de ellos del fútbol juvenil y 8 del fútbol infantil. “Los chicos que son jugadores de la pensión del club, que son los de mayor proyección, algunos de Selección, todos tienen que terminar la educación, para nosotros es fundamental y obligatorio que terminen el secundario. Entendemos que tienen que estar preparados, porque la sociedad está cada vez más difícil”, apunta Arcorace.
Si bien Lanús tiene una escuela propia, los chicos no estudian ahí, porque es privada y porque tiene un sólo turno. Los pibes de la pensión concurren al Colegio Luis Piedrabuena, ubicado a 50 metros del club y al Alfonsina Storni, ubicado a 600 metros. Todos asisten en contraturno a los entrenamientos. Los chicos que entrenan a la mañana van a la tarde a estos colegios y viceversa. Hay 4 o 5, que son los más grandes, que hacen colegio nocturno en el Piedrabuena. “Creo que el club se destaca por eso. Por la contención del jugador, no sólo con los chicos que vienen del Interior, también con los que están acá también. El club trabaja muy bien de forma social”, añade Pagano.
Pero y si bien es clave, no sólo es la educación. Lanús también trabaja y de manera importante, aspectos centrales para la formación del jugador y la persona: la psicología y la alimentación. Por día, en el Comedor del club, comen 150 chicos: los de la pensión y los que luego de entrenar irán por la tarde al colegio.
En el aspecto psicológico, el club posee un staff de 6 psicólogos: tres en fútbol Juvenil, dos en Reserva y uno en fútbol infantil: “No es fácil contener a los chicos por todas las problemáticas que existen en nuestro país, de lo económico, del desarraigo, de la mala alimentación”, enumera Pagano.
Actualmente, Víctor Gauto está al frente de la captación que realiza el club. Él es el único que está siempre, después, el club puede enviar a uno o dos DT del fútbol juvenil o bien a un Coordinador, según dónde sea al prueba. “Trabajamos con un modelo de captación que tiene a una sola persona que hace todos los viajes. También uno o dos DT de fútbol infantil lo acompañan a Victor a captar chicos. Porque ellos saben que material hay y que les falta y eso hace más sencillo el proceso. Aleatoriamente a eso, los coordinadores pueden llegar a viajar a alguna prueba específica”, informa Arcorace.
La Selección Argentina Sub 17 quedó eliminada del Mundial de la categoría en Brasil. Ese equipo de Pablo Aimar tiene cinco jugadores de Lanús (que podrían haber sido 6, de no ser por una lesión) Ningún otro equipo le aportó tanto. Y eso también es una marca destacada.
En Brasil, con Aimar, están Franco Orozco, Lucas Varaldo, Juan Pablo Krilanovich (delanteros), Rocco Ríos Novo (arquero) y Kevin Lomónaco (defensor). Todos ellos han sido campeones con el Grana en la última Superliga de divisiones inferiores. El que se perdió por lesión fue Julian Aude.
Y, en el plantel de Luis Zubeldía, hay 19 jugadores de las inferiores de Lanús, tres, que ya son “viejitos”: Nicolás Pasquini, Marcelino Moreno y Lautaro Acosta, junto a Sand, el emblema máximo del club. Precisamente Pepe, el goleador histórico de la institución, nacido en River, habla de lo que es compartir el plantel con tanto piberío y, hace un tiempo, le decía a "Doble Amarilla": "Siempre trato de aconsejarlos. Y ellos me hacen sentir una parte importante en el grupo. Estoy contento con como me tratan y trato de siempre estar presente en los entrenamientos y dar el ejemplo entrenando y que me vean que estoy bien".
Después, hay 16 pibes de las categorías que van desde el ’97 hasta el 2001, con Pedro De La Vega en el extremo más juvenil. Sí, De la Vega, el pibe que le dio la victoria que lo llevó a la cima de la Superliga. Y, no, no es casualidad.
Es más, un dato color. El otro día, en la victoria de Lanús 2-1 ante Boca. Había 10 jugadores formados en Divisiones Juveniles. Ocho en Lanús y dos en Boca. Del lado Xeneize jugaban Esteban Andrada (arquero de aquella Copa Libertadores 2017), Carlos Izquierdoz (campeón de la Sudamericana 2013) y Eduardo "Toto" Salvio (figura de ese Lanús campeón en 2007), los tres formados en Lanús. Además de Pasquini, Lódico, Moreno, Bernabei y Valenti. ¿Los de Boca? Ezequiel Muñoz (que jugó para Lanús) y Carlos Tevez.
El plantel de Zubeldía suma a Lucas Vera (Cat ’97), Gabriel Carrasco (Cat ’97), Jorge Darío Cáceres Ovelar (Cat ’98), Juan Pablo Cozzani (Cat ’98), Tomás Belmonte (Cat ’98), Gastón Lódico (Cat ’98), Nicolás Thaler (Cat ’98), José Luis Sinisterra (Cat ’98), Lautaro Morales (Cat ’99), Matías Donato (Cat ’99) Damían Pérez (Cat ’99), Lautaro Valenti (Cat ’99), Facundo Pérez (Cat ’99), Matías Esquivel (Cat ’99), Alexander Bernabei (Cat ’00) y Pedro de la Vega (Cat ’01).
Y, más allá de la enorme presencia de pibes, en el Sur todavía se ilusionan más con lo que viene: “Hay, abajo, muchos cracks así que sabemos que tenemos un buen futuro”, se entusiasma Russo y Rodríguez Pagano se suma: “Vienen camadas muy buenas, hay que esperarlas. Lógicamente. Son chicos todavía. Creo que el club tendrá excelentes jugadores por muchos años”.
Lanús lidera la Superliga, de los 19 jugadores de sus inferiores que tiene en el plantel, 14 ya debutaron en primera y en las Juveniles es el Monarca del fútbol argentino, ya que este año, tiene a tres categorías con opciones de repetir los últimos éxitos. Cierra Russo, con el pecho inflado de orgullo: “El proyecto integral de Lanús lo ubica entre los 4 o 5 clubes más importantes de la Argentina”. Y habrá que creerle, los resultados, los pibes que llegan y se consolidan en Primera y su desarrollo, hablan por sí solos.