El presidente de Boca Juniors, Juan Román Riquelme, dialogó con la prensa tras la renuncia del entrenador Diego Martínez y habló del complicado presente deportivo de la institución.

"Hay que tomar las cosas con calma. Estamos dolidos, tristes, porque queremos que el equipo compita. Lo más importante para mí es mandarle a los hinchas un abrazo grande, pedirles disculpas porque el equipo no compite como lo tiene que hacer", aseguró el máximo dirigente boquense, en rueda de prensa en Córdoba.

Al mismo tiempo, agregó: "A partir del día lunes pensaremos en Argentinos Juniors. Teníamos la ilusión de hacerlo bien, debemos mirar para adentro, tragar saliva. El fin de semana que viene tenemos revancha".

Por otro lado, se refirió a cómo serán las próximas horas del plantel: "Mañana creo que tienen libre, el lunes entrenarán. Mañana será un día para pensar, para analizar. Esto es fútbol, es un deporte con mucha emoción, con mucho nervios, pero es un deporte. Y en el deporte se debe competir".

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Para finalizar, el máximo directivo azul y oro subrayó: "Tenemos que competir mucho mejor. Que lo miren de otra manera o que piensen que estamos en una guerra, yo no lo vivo así. Trato de ser sincero y claro, debemos empezar a competir. Entre todos vamos a salir de esta".

El director técnico de 45 años llegó con poca experiencia, pero el paso por las inferiores del club, las buenas experiencias en Tigre y Huracán, sumado al conocimiento que tenía Juan Román Riquelme de él, lo llevaron a ocupar un puesto de privilegio.

Fue mirado de reojo cuando tomó el cargo, pero poco a poco fue mostrando cuál era su manera de trabajar y partidos puntuales como el empate ante River en El Monumental, generaron una sensación de esperanza en el hincha. Por un momento, las formas fueron más importantes que el resultado.

La Copa de Liga empezó mal, pero terminó metiéndose en los cuartos de final casi por la ventana, algo que lo llevó a disputar un nuevo Superclásico. Dicho duelo fue en Córdoba, Boca fue muy superior a River y se lo terminó llevando por 3-2. Posiblemente, en ese momento tocó el techo de rendimiento. 

Boca era el gran favorito ante Estudiantes en las semifinales de la Copa de la Liga y ganaba bien, pero no lo liquidó, y una patada de Cristian Lema derivó en el empate del “Pincha” y la eliminación del equipo de Martínez en penales. Desde ahí, la debacle no tuvo fin. 

La Copa Sudamericana dejó un mar de sinsabores en Brandsen 805. El segundo puesto en el grupo tras un insólito empate ante Fortaleza complicó el panorama. En octavos de final, luego de jugar más de 90 minutos con un hombre menos en Brasil, los dirigidos por Martínez fueron eliminados por Cruzeiro en los penales. Sí, los mismos penales que lo llevaron a la final de la Libertadores en 2023 lo dejaron afuera de dos competencias.

El cierre de su paso por el “Xeneize” fue el duelo ante el “Millonario”. River jugó con un equipo alternativo, ya que tiene la Libertadores por delante, y Boca no pudó superarlo. La polémica por el gol anulado y la pelea de “Chiquito” Romero con un plateista fueron el broche de un final precipitado. La derrota ante Belgrano en Córdoba terminó siendo la ratificación de su fin de ciclo.

Los números de Diego Martínez en Boca 

El entrenador agarró el cargo en enero del 2024 y en casi 10 meses de trabajo tuvo 45 encuentros al frente del cargo: obtuvo 20 victorias, 15 empates y 10 derrotas, para tener el 55% de los puntos. En su estadía en Boca, el equipo de Diego Martínez ganó la mayor parte de los partidos de local, más del 80% de los puntos, y solo perdió un encuentro: ante River, que promovió su fin de ciclo.