River cierra un semestre en el que aprobó con lo justo y se lleva mucha tarea para el hogar
El covid llegó en el peor momento de la temporada y amenazó con dejar al Millo "en suspenso" de cara al segundo semestre. Pero apareció Santa Fe y zafó en la Copa Libertadores. Más allá del coronavirus, que atentó contra sus chances en la Copa de la Liga, el semestre en general fue regular: el juego nunca apareció con continuidad y los cambios en el equipo fueron casi constantes, además, los recién llegados están en pleno período de "adaptación" y aún no aportan soluciones.
Con el 1-3 ante Fluminense terminó el semestre de River. El que empezó con un 2-2 ante Boca, en La Bombonera, el pasado 2 de enero. Incluyó una eliminación muy digna de la Copa Libertadores 2020 a manos de Palmeiras, una goleada por Copa Argentina ante un equipo de menor rango y una victoria sobre Atlético Tucumán, no llegó a la final de la Copa Maradona y en esta Copa de la Liga, perdió ante Boca y ante el covid. En la Libertadores 2021 su fase de grupos fue el resumen del semestre: Regular para abajo, pero estará en los 8vos de Final en julio y tendrá la chance de redimirse. Eso sí, el alumno River se lleva mucha tarea para el hogar y en algunas materias debe mejorar sus números.
Los números le cerraron a River. El equipo logró meterse en 8vos de Copa Libertadores aunque le costó mucho, superó la fase regular en la Copa de la Liga y sigue con vida en la Copa Argentina. En la Copa Maradona el combo empate ante Boca y derrota ante Independiente lo dejaron fuera de la final y en los 4tos de la Copa de la Liga, con un equipo armado a los ponchazos por el coronavirus, terminó cayendo por penales ante su máximo rival. Los números le cerraron, los objetivos de mínima se alcanzaron. Aprobado en este rubro, entonces.
Fue un semestre dónde hubo tres Superclásicos. Y River aprobó. ¿Por qué? Porque jugó los tres de visitante y no perdió ninguno en los '90. Incluso, el tercero de ellos lo jugó con el pibe Leo Díaz en el arco, haciendo su debut absoluto y con muchos pibes, por la ola de covid que azotó el plantel. Los penales le dieron a Boca el pasaje a las semis y a River lo dejaron sin nada. Fueron 2-2 en enero, 1-1 en marzo y 1-1, de nuevo, en mayo. Fue la primera eliminación mano a mano de un River de Gallardo ante el Xeneize, pero fue "maquillada" por el hecho que River afrontó el duelo con un equipo disminuido y, aún así, logró llevarlo a los penales ante un Boca con todos sus futbolistas a disposición. Otro aprobado raspando.
Más allá de la ola de covid, que con 22 casos no deja mucho resquicio para el análisis, River sufrió un duro semestre en cuánto a las lesiones. Empezando con la grave fractura de Javier Pinola ante Platense, en la tercera fecha de la Copa de la Liga, que lo dejó out todo el semestre. También River sufrió los problemas musculares de Enzo Pérez, una sinovitis de Matías Suárez y hasta Gonzalo Montiel tuvo problemas físicos, mononucleosis y coronavirus. A eso hay que sumarle que, por lesión, suspensión y distintas cuestiones tácticas, River por ejemplo, utilizó 7 combinaciones de laterales en 23 partidos y ocho parejas o líneas de tres centrales. En la delantera también varió mucho, marcado por cuestiones físicas y futbolísticas, según indica un relevamiento del periodista Juan Manuel Nahoum, en Twitter.
Este no fue el River copero de otros tiempos. Sólo en la vuelta con Palmeiras, por las semis de la Copa 2020, lució la imagen acostumbrada. En la ida de ese partido, el 0-3 sentenció una serie que el equipo mereció llevar, al menos, hasta los penales. En la Copa 2021 logró el pasaje a 8vos de Final gracias a Santa Fe. Lo que sí mantuvo es su récord de no perder en condición de visitante: empató con los tres rivales y uno de esos empates, el de Paulo Díaz ante Junior, terminó siendo vital. Como local, venció trabajosamente a Junior por la mínima, a Santa Fe en un partido atípico, entre la ola de covid y Enzo Pérez en el arco y con Fluminense pudo haber perdido por más. Sin embargo, está en 8vos, y para esa instancia recuperará la forma física de sus jugadores, aunque también podría tener bajas, ¿y altas?.
No fue un buen semestre de River en líneas generales. El equipo lleva 7 años sin ganar el torneo doméstico, terminó ensayando una imagen algo endeble en la Copa Libertadores 2021, perdió el primer mano a mano del ciclo Gallardo ante Boca y las seis caras nuevas que trajo aún no han dado del todo la talla, con la excepción de David Martínez que se adueñó del puesto. Por supuesto, la calificación no es más dura por los atenuantes: el primero de ellos, fue el coronavirus que minó al plantel a las puertas de la semana definitiva del semestre, el segundo de ellos fue que, aún con el plantel en estas condiciones, logró salvar la ropa en la Copa y con el Xeneize terminó dejando una imagen decorosa por haber llevado la serie a los penales.
En Copa Argentina es dónde mejor hizo las cosas: goleada ante el equipo menor y victoria sólida ante el rival de igual categoría. La definición de la Libertadores 2020 le dejó buen sabor por la manera y en la Copa Maradona pagó el impuesto de haber apostado a jugar con titulares todos los partidos. River sigue en la búsqueda de reemplazar a los "mejores compañeros" que perdió desde la final de Madrid: Pity Martínez, Exequiel Palacios, Juan Fernando Quintero, Lucas Martínez Quarta y, ahora, Nacho Fernández. Ahí, en las faltas en ese sector y en reemplazos que aún no terminan de dar todo lo que se espera de ellos (con excepción de Martínez y, algunos pasajes de Agustín Palavecino), anidan los cambios constantes de dibujo y de nombres y la irregularidad que marcó estos seis meses. Aprobó, pero tendrá que estudiar mucho más para mejorar sus calificaciones. Vuelva en julio, alumno.