Salvatierra: "No queremos volver más a donde estuvimos"
El presidente de Atlético en reemplazo de Mario Leito, que está abocado a su candidatura a intendente de San Miguel de Tucumán, habló en exclusiva con Doble Amarilla y manifestó que la clave del Decano es su austeridad. "Hemos vivido muchas cosas en estos últimos años que no quisiera volver a vivir", aseveró. Respecto a la Copa Superliga, sentenció: "Nos podemos permitir soñar".
(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) El presidente de Atlético Tucumán, Enrique Salvatierra, que ocupa el cargo en reemplazo de Mario Leito, abocado a su candidatura a intendente de San Miguel de Tucumán, habló en exclusiva con Doble Amarilla y manifestó que la clave del Decano es su austeridad. "Hemos vivido muchas cosas en estos últimos años que no quisiera volver a vivir", aseveró. La entrevista.
DOBLE AMARILLA: Siempre han tenido el lema de no olvidarse de donde se vino... ¿eso tiene que ver con el momento de Atlético Tucumán y el ser ordenado dentro y fuera de la cancha?
ENRIQUE SALVATIERRA: Sin ninguna duda. Nosotros hemos vivido un montón de cosas en estos últimos años que no quisiera volver a vivir. Eso te enseña a cuidar el peso, a invertir bien. Obviamente se han cometido errores, uno va aprendiendo de esas equivocaciones. No hay secretos: hay que no olvidarse de donde uno viene para no regresar al mismo lugar. Estuvimos en el Federal A, deambulamos algunos años en el Nacional B, subimos y volvimos a bajar. Cuando regresamos, no queríamos volver a descender más.
DA: ¿Se consideran un club austero?
ES: Somos un club austero, nos cuesta mucho y hacemos todos un gran esfuerzo. No tenemos gerente, no tenemos CEO, nos hacemos cargo de nuestros compromisos en su totalidad. Apuntamos a que la excelencia deportiva también se traslade a nivel dirigencial. Si no se crece como institución, se le puede pegar en lo deportivo, pero después no te mantenés. No queremos volver más a donde estuvimos, por eso trabajamos duramente día a día.
DA: ¿Se sufrió el partido con River?
ES: No es fácil hacerle partido a River, que tiene su presupuesto y jugadores de calidad tremenda. La verdad es que, en la vuelta, nos cagaron a pelotazos todo el partido. Pero esto es fútbol y le habíamos ganado muy bien en nuestra cancha. En el partido de 180 minutos, logramos superarlas. Con conocimiento de nuestras limitaciones, logramos convertirle un gol de visitante. No nos creemos, eliminamos al campeón de la Libertadores y todo, pero ya estamos pensando en Tigre. Nos podemos permitir soñar.