Se va cerrando el telón de la temporada 2021 y asoma 2022 con los descensos en el horizonte
River va camino a quedarse con el torneo del fútbol argentino. Mientras tanto, el resto pelea por las clasificaciones a las competiciones internacionales. También están los que deben sumar obligatoriamente de cara al próximo año pensando en los últimos puestos de la tabla de promedios. ¿Cómo harán los clubes de menor presupuesto para adquirir experiencia y pelear los momentos difíciles?
La temporada 2021 del fútbol argentino va llegando a su fin y empiezan a definirse varios escenarios. Luego de la histórica conquista de Colón de la Copa de la Liga, River se encamina a ser el próximo campeón del Torneo Liga 2021. En paralelo, quedan 21 puntos en juego para definir una batalla feroz por las clasificaciones a la Copa Libertadores 2022. ¿Y qué pasa con los de abajo? ¿No pelean por nada? Sí, aunque muchos no lo recuerden, en la próxima temporada vuelven los descensos.
El Millonario lleva ocho victorias consecutivas y en la última fecha goleó a Argentinos Juniors para estirar a nueve puntos la ventaja que ya tenía sobre su perseguidor Talleres, que no logró hacerse cargo de su protagonismo en el torneo. Además de perder con River en Córdoba y un jugador más, se le escapó el último partido ante Lanús que lo ganaba por 3-0 (finalizó 3 a 3).
Boca, si bien hizo una campaña olvidable en el Torneo Liga 2021 (con el peso de haber tenido que jugar partidos con la Reserva), sumado a la polémica eliminación por Copa Libertadores ante Atlético Mineiro, todavía tiene una bala en la recámara llamada Copa Argentina. Deberá vencer al Bicho el próximo tres de noviembre y esperar en la final por el ganador del duelo entre Talleres y Godoy Cruz.
El Xeneize otorga ventajas en el torneo y hasta ahora sólo está clasificado para la Copa Sudamericana, algo que podría significar un golpe bajo en el flojo desempeño futbolístico del plantel conformado por el Consejo de Fútbol que lidera Juan Román Riquelme.
Esa misma situación se traduce para los de Avellaneda. Racing e Independiente no repuntan en el campeonato y por ahora la idea de Libertadores se ve lejana. En el primer caso, la Academia contrató a último momento a Fernando Gago, una apuesta que debutó con el pie izquierdo (perdió contra Central en Rosario). En tanto, el Rojo, abrumado por las deudas y sin un plantel competitivo, apela a la sabiduría de Julio César Falcioni, hoy un tanto alejado de las canchas por problemas de salud que lo tienen a maltraer.
Sin embargo, el club grande más complicado de cara a la próxima temporada es San Lorenzo. De momento, el Ciclón no da en la tecla y se ubica en la mitad de tabla del torneo. Además, por los magros resultados de la temporada anterior, se acerca lentamente a la zona complicada de los promedios. Esto se reproduce en otros clubes, como Banfield, Gimnasia y Newell’s, este último el más complicado (con los resultados de hoy, arrancaría en la anteúltima posición, solamente delante de Arsenal).
¿Se acaba el fútbol de los pibes?
La crisis económica que produjo la pandemia del coronavirus no fue una excepción para el fútbol. Los clubes grandes no se destacaron por las fuertes contrataciones y mucho menos los medianos y chicos. Ante la falta de opciones y la devaluación de la moneda local para atraer futbolistas que residen en el extranjero, la Primera División apeló al mercado de pases local (muchas veces de Ascenso) y a jugadores surgidos de la cantera.
River es el mejor ejemplo de haber reemplazado jerarquía (Gonzalo Montiel, Nacho Fernández, Rafael Santos Borre y Juan Fernando Quintero) con buenos productos de las inferiores. Hoy se destacan los canteranos Benjamín Rollheiser (21 años), Santiago Simón (19) y Enzo Fernández (20) en el equipo de Marcelo Gallardo. Eso sin mencionar la temporada de Julián Álvarez, considerado el mejor futbolista local. Boca tampoco se queda atrás. Con menor voluminosidad, aparecen Luis Vázquez (20), Aarón Molinas (21), Agustín Almendra (21), Alan Varela (20) y Marcelo Weigandt (21, lesionado). No sería lo mismo para los casos de Racing, Independiente y San Lorenzo. Se pueden vislumbrar a Sergio Barreto (22) en el Rojo y a Alexis Sabella (20) y Nicolás Fernández Mercau (21) en el Ciclón.
En otros equipos la presencia de juveniles fue importante, pero no suficiente. Banfield, hoy en los últimos lugares del Torneo Liga, tiene al juvenil Juan Manuel Cruz (22 años) como su máximo artillero (siete goles). Otra aparición interesante es la de Martín Ojeda, surgido en Ferro, de pasos flojos en Racing y Huracan y con un excelente presente en Godoy Cruz de Mendoza. En el equipo del discípulo de Marcelo Bielsa, Diego Flores, es el goleador con 10 tantos, casi igualando a Julián Álvarez, Pepe Sand y José López (artilleros del torneo con 11 goles).
Muchos dirigentes y directores técnicos sostienen que los momentos complicados se deben afrontar apelando a la experiencia. En situaciones de máxima tensión, es usual que los equipos se inclinen por futbolistas de trayectoria y capaces de poder surfear situaciones de tensión. Por el temor a descender y con la recuperación económica por la vuelta del público en el horizonte, muchos clubes apuntan a realizar un mercado de pases con mucho gasto y poco ahorro.
Los descensos son poco evitables
Si bien muchos dirigentes siguen soñando con la posibilidad de tener otra temporada sin descensos, el cronograma y el formato actual dan una cachetada de realidad. El próximo año la Primera División tendrá 28 equipos, dos menos que el torneo de 30 que diseñó en sus últimos años de vida el ex presidente de la AFA Julio Grondona.
Como viene contando Doble Amarilla, la Liga Profesional apunta a que haya dos descensos en 2022 y cuatro en 2023, 2024 y 2025, siempre limitando a dos los ascensos de la Primera Nacional. De esta forma, el anhelo es llegar a 22 equipos en la temporada 2026, el formato ideal para los dirigentes y los dueños de los derechos de TV que exigen un producto más rentable y atractivo.
Si bien serían sólo dos descensos el próximo año, los clubes comprometidos no quieren llegar con la cuerda floja a los cuatro descensos. En esos compromisos aparecen Banfield, San Lorenzo, Platense, Atlético Tucumán y Gimnasia entre otros. El flamante DT del Taladro, Diego Dabove, sintetizó hoy lo que es una máxima para todos los equipos con urgencias: “Quedan 7 fechas que nos van a servir muchísimo para evaluar rendimientos y distintos tipo de situaciones a nivel equipo e individual. Son 7 fechas desde el sábado que son fundamentales: cada punto que sumemos, cada mejora que haya partido a partido para nosotros es fundamental y estamos enfocados en eso desde hoy mismo”.