Un Pity Martínez cada vez más incómodo en la MLS sigue siendo la prioridad de mercado para Gallardo
La experiencia del ex River no es para nada buena. Todavía no encontró su nivel y no se entiende con el holandés que comanda al vigente campeón. Si bien es muy difícil su salida pronta, este contexto configura un escenario propicio para que Gallardo siga soñando con repatriarlo, tal y como contó "Doble Amarilla" días atrás.
(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) El comienzo del Pity Martínez en la MLS lejos está de ser el esperado por el jugador. Su nivel no es el que él quiere y no parece entenderse con su DT, el holandés Frank De Boer. En el último partido del Atlanta United, Martínez salió reemplazado. En su lugar ingresó otro argentino "Tito" Villalba, sin embargo, el ex River y Huracán ni saludó a su reemplazo, se fue derecho al banco, insultó al aire y golpeó el banco de suplentes. Todo un síntoma.
En River, Gallardo sigue tomando nota. Tal y como develó "Doble Amarilla" días atrás, el DT anhela que el "Pity" vuelva al club para afrontar el segundo semestre del año. No es nada sencillo, claro. Pero el contexto actual favorece el anhelo del DT del "Millo" y de su ex jugador.
Como contó "Doble Amarilla" ahora hay dos situaciones que favorecen aún más el ferviente deseo del Muñeco: la primera, River ya está en 8vos de la Copa. La segunda es que el Pity se distancia cada vez más del "frío" De Boer y no parece ser alguien capaz de sacar lo mejor de él.
Gallardo entiende que, pese a que River tiene más necesidad de vender que posibilidades de comprar, ese puesto tiene que ser reforzado a la espera de la vuelta de Juan Fernando Quintero, pensada para fines de septiembre, octubre. Sabiendo que no tiene muchas chances de probar y que su bala de plata es una sola, el entrenador apuntó a un nombre que le dé garantías.
El Pity se fue de River como un ídolo. Las copas ganadas, sus goles a Boca y el histórico “tercero” en la final de la Libertadores lo ponen en un peldaño altísimo en la historia del club de Núñez. Su presente en el Atlanta no es el que esperaba. Tras acordar su pase a la MLS (hay que recordar que pese a anunciarse el 9 de diciembre, el jugador estaba vendido desde el 16 de octubre) y a días de viajar a USA, Martínez se enteró que el “Tata” Martino no iba a ser su entrenador en el Atlanta. Ese ya fue un golpe. Hasta el momento Frank de Boer, actual DT del equipo estadounidense, no logró sacar lo mejor del diez que aún no llega a demostrar su potencial en su nueva liga y sigue por ese camino, hechos como el del último fin de semana así lo demuestran.
Pero no es todo, según confirmaron desde el entorno familiar a "Doble Amarilla", el Pity no termina de adaptarse a la distancia. Lejos de invadir la privacidad del jugador, sí vale la pena explicar los motivos con un poco más de detalle. En el segundo semestre del año pasado (antes de firmar con Atlanta), el Pity se había separado de Priscila Ventura, su pareja y madre de su hija Pilar. Pero a principio de año se reconcilió y hace 15 días la pareja contrajo matrimonio en el registro civil de la comuna 8, en Villa Lugano. Su mujer y su hija por el momento viven en Buenos Aires y esa distancia le es muy difícil de llevar, según relatan desde su entorno.
El vínculo de Gallardo con Martínez fue siempre excelente, casi paternal dicen algunos. La historia en River es conocida: el técnico confió siempre en el jugador, lo potenció pese a la resistencia inicial del público y lo convirtió en ídolo y artífice central en todos los títulos. Lo que pocos saben es que el DT y su ex jugador hablan todas las semanas y más de un día a la semana. En esas charlas empezó a surgir la idea de por qué no pegar la vuelta ante este contexto. Es más, según pudo saber "Doble Amarilla" de fuentes riverplatenses, Gallardo ya le hizo saber a los dirigentes que todos los esfuerzos de este mercado de pases deberían ponerlos en “la vuelta del Pity”.