Federico D'Elia: "El documental de Bilardo sensibiliza incluso a quien no le interese tanto el fútbol"

Este último jueves 24 de febrero se cumplieron 39 años de un hito en el fútbol argentino y en la vida de uno de las más enigmáticas, entrañables, amadas y odiadas personalidades del mundo de la redonda: Carlos Salvador Bilardo firmaba contrato para dirigir a la Selección Argentina con vistas al Mundial de México 1986. Así arranca "Bilardo, el Doctor del Fútbol", que se puede ver desde hace varias horas en la plataforma de streaming HBO Max.

El documental está dividido en 4 capítulos -de un promedio de 50 minutos cada uno- y atraviesa el costado profesional y también personal del "Doctor". Entre los pasajes, se pueden apreciar anécdotas conocidas y otras no tanto; pero, sobre todo, con ese mundo inexpugnable de archivo que el propio Bilardo conserva en su casa y al que se tuvo acceso por primera vez para este trabajo fílmico. Además, muestra cómo era fuera de la cancha, su relación con seres queridos y todas sus manías y cábalas.

Una persona muy relacionada a Estudiantes de La Plata a lo largo de su vida, como el propio ex DT campeón del mundo, no podía no tener que ver en el equipo de producción del documental que refleja su vida. Federico D'Elia, reconocido actor argentino -"Santos" todavía para muchos, el inoxidable papel que interpretó en la serie Los Simuladores- y fana del "León", dialogó en exclusiva con Doble Amarilla sobre cómo se gestó su llegada a este trabajo y su sentir sobre lo que representa en su vida y en la de los demás la figura de Carlos Salvador Bilardo.

Doble Amarilla: ¿Se te ocurrió a vos la idea? ¿Cómo llegaste a formar parte del proyecto?

Federico D'Elia: Hacía tiempo que tenía ganas de hacer un documental de Bilardo, pero llamé a la gente de HBO por otra cosa en realidad, para una ficción. Y charlando de todo, les conté de mi deseo de hacer este trabajo, que yo tenía el deseo de realizar y ellos me dijeron que estaban intentando llegar a un acuerdo con su familia para hacerlo, y ahí me invitaron a participar.

DA: ¿Es un ídolo tuyo? ¿Qué representa Bilardo para vos?

FD: No tengo ídolos, pero sí es muy importante para mi siendo hincha de Estudiantes y viviendo fielmente las mejores épocas en las que saca campeón al club y también a Argentina, lógicamente. Forma parte de mi infancia y adolescencia, de mi identidad deportiva y siempre me resultó un ser muy especial. Mi viejo conocía a esa camada campeona del mundo de EDLP y entraba a la concentración, así que formar parte de esto, para mí, fue glorioso.

DA: A medida que veías el archivo, sobre todo del momento en que se lo criticaba tanto a él en su etapa de la selección: ¿había algo que no te acordabas y te sorprendió?

FD: No sé si hubo algo que me sorprendió demasiado. Yo nací en 1966 y me acordaba de todo. Pero al hurgar en el archivo y querer investigar más, me causó mucha impresión el ataque sistemático y gigantesco que sufrió El tipo laburaba y laburaba, con el equipo que jugaba mal, pero estaba en la suya más allá de los resultados. Él estaba convencido que cuando estén todos juntos, les iría bien, y lo pudo demostrar.

DA: Es una de las personas del mundo del fútbol de las que más se ha hablado en los últimos 50 años: ¿Conociste otro Bilardo en este documental?

FD: Conocí aún más en profundidad al Bilardo que conocemos todos, pero al indagar en su entorno, en sus familiares, también conocí al ser humano, no solo a la maquinita del fútbol. Descubrí a otro tipo, el que disfrutaba absolutamente el poco tiempo que pasaba con su familia. Uno lo tiene como obsesivo, duro, y ahí se lo veía divertido, presente cuando tenía que estar por si alguien cercano sufría o lo necesitaba, él siempre estaba.

DA: ¿Hubo algún testimonio que les costó más conseguir o todos fueron receptivos a la idea?

FD: El testimonio que más nos costó fue el de César Luis Menotti, le insistimos por todos lados para hacerlo y lo logramos 10 días después de terminar las grabaciones. Fue muy gratificante. Era muy importante que diga que sí, por la grieta futbolera generada que no sirve para nada y era un acercamiento importante. Más allá de lo que diga o deje de decir. Sí tuvimos complicaciones por contexto, porque se grabó en pandemia y demás. También tuvimos que convencer a la familia y yo me ofrecí para cuidarlos, para que no se digan cosas que no fueron. Yo iba a estar muy arriba de todo para que no se falte el respeto. Y se abrió una puertita gracias a Miguel Ángel Lemme porque le dijo a Daniela hace un tiempo: "Lo vi a Fede en la cancha y le dio un abrazo a Pacha en la inauguración de la cancha tremendo, no tengo dudas que en el documental lo va a cuidar a Carlos", viste esa sensación de hermandad, de cofradía increíble, generó esto...

DA: Crees que este documental puede cambiar la percepción de alguna persona sobre Bilardo, porque no es solo "el loco del fútbol", sino que hay imágenes de él con su familia, habla su esposa Gloria y demás...

FD: Yo lo conocía y me cambió su imagen, imaginate para aquel que no tenía la posibilidad de saber cómo era o que tiene otra visión de él, y hablo desde lo personal. Desde lo futbolístico, si Bilardo no te gustaba, no te va a gustar por verlo acá; tal vez lo entiendan más, pero de ahí a que les guste, es otra cosa.

DA: Hablaste con la hija, Daniela, y lo contaste en Twitter, de su emoción al ver el documental. ¿Qué te generó ese mensaje? Se puede saber qué te dijo?

FD: Para mí, que Daniela me dé esa devolución de satisfacción absoluta por lo hecho en el documental, era muy importante. Le prometí que iba a estar arriba del archivo que jamás le mostraron a nadie hasta que llegamos nosotros y que no se iba a mostrar nada que no quisieran que se muestre. Y el mensaje fue muy lindo. Me dijo que estaba súper emocionada y agradecida por el cuidado real que hubo de todos. Contenta con los testimonios de los que lo quieren y los que no también, sintió respeto. No paró de llorar y fundamentalmente en el cuarto capítulo, para nosotros fue muy importante. Ahí, más allá de la respuesta de la gente, fue decirme: no fallé, se sintió cuidada y era lo que me importaba a mi. Y más allá de eso, el documental en sí no apunta a lo amarillo, sino a investigar y a conocer a Carlos y a llegar a la sensibilidad de la gente por ver un documental de Bilardo y en cierto punto, de fútbol y lo veo reflejado en los comentarios que leo en redes sociales.