Adiós a una leyenda: Falleció Jorge Griffa, formador del fútbol argentino
Se fue una verdadera leyenda de la historia de nuestro fútbol. Un formador de talentos sin igual. A los 88 años, falleció Jorge Bernardo Griffa, uno de los máximos referentes de las canteras argentinas.
Jorge Bernardo Griffa, símbolo ineludible de Newell’s Old Boys de Rosario y de la formación de talentos en las divisiones juveniles, falleció hoy a los 88 años, según confirmó la propia institución ‘rojinegra’.
“Lamentamos profundamente el fallecimiento de Jorge Bernardo Griffa. El Maestro, símbolo indiscutido de Newell’s, fue jugador, técnico de inferiores y el creador del semillero leproso que dio enormes figuras al mundo. Tu legado siempre será parte de nuestra historia, que en paz descanses”, publicó la “Lepra” en sus redes sociales.
Griffa tenía un ojo único para detectar los talentos y una dedicación infatigable para brindarse en esa función. Esa dedicación fue con la que, luego, rastrilló la Argentina en busca de jugadores le fue inculcada desde muy pequeño.
Al principio de su carrera, viajaba más de una hora en autobús y luego en la moto de su tío desde Casilda hasta Rosario para entrenar en Newell's. También trabajaba en la tienda de ramos generales "La Unión" de su padrino porque "solíamos ganar dos pesos, nada, muy poco" jugando para Newell's.
Después de cinco años en Newell's y de una exitosa Copa América 1959 con Argentina, Griffa captó la atención de Atlético de Madrid. Durante una carrera de 12 años en España, Griffa ganó tres Copas del Rey y La Liga en 1966, quebrando la hegemonía de Real Madrid en una defensa que solamente permitió 20 goles en 30 partidos esa temporada. Dice mucho que 50.000 personas hayan asistido a su homenaje en el Estadio Metropolitano.
Griffa se describiò como un defensor "muy duro" que también podía jugar como mediocampista defensivo y, en una época con escasa ciencia del deporte, dice que jugó la mayor parte de su carrera con un desgarro en el ligamento cruzado anterior tras sufrir una lesión a los 21 años. Cuando su carrera terminó, dirigió a Newell's durante seis meses antes de darse cuenta de que no era lo suyo. "Me di cuenta de que no sabía nada", dijo un sincero Griffa, que descubrió su verdadera vocación en esa experiencia.
El descubrimiento de que el desarrollo de jugadores era su punto fuerte ha beneficiado a generaciones de jugadores argentinos.
Griffa se avocó a construir un sistema de desarrollo de inferiores en Newell's, a construir un centro de entrenamiento en un basural en las afueras de Rosario y a recorrer el país en busca de talento. La calidad del trabajo de Griffa fue reivindicada en 1988, cuando Newell's ganó el título de la primera división argentina con un equipo integrado exclusivamente por jugadores formados en el club y, por añadidura, influenciados directamente por Griffa.
"Me pregunté lo siguiente: ¿Cómo vamos a competir, con un club chico como Newell's, contra River, Boca, Independiente, Racing y Huracán, que era grande en ese momento?", dijo Griffa. "Lo haremos a la inversa", continuó. "Todos los clubes tienen el deseo de traer chicos del interior, pero no los van a buscar".
Griffa creó una red de informantes en la región, y les prometió a los clubes juveniles que serían recompensados si uno de sus chicos llegaba a la primera de Newell's.
"Fue el sacrificio de mi vida, de la vida de mis hijos, de mi mujer, todo, un torbellino de cosas. Compromisos, responsabilidades, ir a ver diferentes clubes del interior -- fue un trabajo inmenso", dijo Griffa.
El oriundo de Casilda fue artífice de la época gloriosa de Newell's entre los 80' y los 90'. En sus manos pasaron los grandes futbolistas que integraron aquellos planteles gloriosos conducidos por José Yudica y Marcelo Bielsa.
Gracias a ese enorme trabajo, en el que descubrió a jugadores de la talla de Jorge Valdano, Mauricio Pochettino, Gabriel Batistuta y muchos otros, tuvo la oportunidad de demostrar la eficacia de su trabajo en Boca Juniors. En el 'Xeneize', fue el encargado de subir a Primera a jugadores como Éver Banega, Sebastián Battaglia, Fernando Gago, Carlos Tévez, Nicolás Burdisso o Pablo Ledesma.
Una de sus últimas experiencias fue en Independiente, club en el cual fue coordinador general de las inferiores, promoviendo a Primera a jugadores como Esequiel Barco. Posteriormente, en febrero de 2020, el Maestro volvió a participar de la vida futbolística de la Lepra, manteniéndose cercano a la coordinación de las juveniles leprosas y con continuas charlas con los integrantes de las diversas categorías.
Actualmente, el edificio construido en el predio de Bella Vista, donado por Bielsa, lleva su nombre. El Complejo Deportivo Jorge BernardoGriffa es apenas una muestra del enorme legado que ha dejado “El Maestro”.
Por su parte, Boca le dedicó una palabras en sus redes sociales: “El Club Atlético Boca Juniors lamenta profundamente el fallecimiento de Jorge Griffa, histórico formador de jugadores y ex coordinador de las divisiones inferiores xeneizes. Saludamos afectuosamente a sus familiares y seres queridos”.
Además, Gabriel Batistuta lanzó un emotivo mensaje en X (ex Twitter): "Gracias maestro por creer en mí siempre, hasta cuando yo mismo dudaba. Mi acompañamiento a sus familiares y afectos . QEPD Jorge Griffa siempre dentro de mi Corazón".