En Estados Unidos una decisión hizo ruido en el mundo motor argentino. El piloto Agustín Canapino, parte del equipo Juncos Hollinger, no participará en la prueba de Road America de la IndyCar tras la polémica de los últimos días, que también involucra al francés Théo Pourchaire (Arrow McLaren).

"El crecimiento del abuso online y el acoso resultantes de los eventos de esta semana han llevado a una experiencia muy difícil para Agustín, el equipo y todos los fans de la IndyCar. La seguridad de Agustín y el resto de los competidores debe ser considerada antes que nada", sostuvo por estas horas Juncos Hollinger en un comunicado.

"El abuso, el odio y el acoso en cualquier forma perjudican este deporte. Debemos priorizar el bienestar mental y físico de nuestros pilotos y nuestra competición", agregó la comunicación oficial de la escuadra.

El estadounidense Nolan Siegel ocupará el puesto de Canapino este domingo en Road America.

El toque de la polémica

El origen de esta controversia está en la carrera de la IndyCar del pasado domingo en Detroit, donde Pourchaire fue sancionado por una maniobra temeraria en la que acabó golpeando el coche de Canapino. El francés terminó la prueba en décimo lugar y el argentino acabó decimosegundo.

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El toque de la polémica

El lunes, Pourchaire publicó un mensaje en su cuenta de X lamentando los mensajes de "odio y amenazas de muerte" que había recibido, presuntamente, por parte de seguidores de Canapino.

"Estoy triste de haber recibido tanto odio y amenazas de muerte en las últimas 24 horas por un incidente tan pequeño en Detroit. Espero que la gente pueda entender que todos somos humanos y que cometemos errores. Pero no es normal abusar de la gente online... Por favor, sed amables los unos con los otros", escribió.

Ese mismo día, Juncos Hollinger y Arrow McLaren también divulgaron un mensaje conjunto en X en el mismo sentido: "No toleraremos ninguna forma de abuso o discriminación. Los que participen en esas acciones no son bienvenidos en nuestra comunidad online".

Al día siguiente,

"Los argentinos somos pasionales y eufóricos, pero no por eso nos tienen que acusar de algo que no somos, por lo que niego rotundamente que nos generalicen y pongan a todos en un lugar que no merecemos", escribió.

"No vi una sola amenaza de muerte a quienes acusaron de recibirlas. Nadie que esté en su sano juicio haría eso, es una barbaridad que se acuse de esto con tanta liviandad y no lo voy a permitir, por eso hago este comunicado. Si alguien lo hizo, NO FORMA PARTE DE NOSOTROS y no merecemos que se nos juzgue así, por algún inadaptado que rechazamos enérgicamente", agregó.

Canapino aseguró, asimismo, que ha recibido y recibe "constantemente abuso y ‘hate’. Aprendí a convivir con ello hace años como le pasa a muchísimas personas y elijo ignorarlos, no hay nada más triste y miserable que esconderse atrás de una red social para insultar", indicó.