El circuito internacional de tenis tiene toda la atención puesta en el francés Benoit Paire tras haber caído en el Challenger de Rennes. El jugador francés cayó ante el británico Jacob Fearnley en menos de 37 minutos, pero lo peor no fue el 6-1 y 6-0 sino que explotó en tras una silbatina generalizada por lo que vieron. 

El problema más grande de esto es la sospecha que levantó por un posible -y supuesto- problema con apuestas ilegales. En lo que va de la temporada, Benoit Paire jugó tan solo 32 encuentros, sólo ha podido ganar en 8. Después de haber llegado, Paire respondió para despedirse de los espectadores que fueron y hasta hizo un gesto. Uno de los seguidores en X le preguntó, incluso: "¿Por qué no te retirás? ¿Cuál es el fin de pararte ahí y no hacer nada, ¿lo hacés solo por el dinero?”. 

En este punto, la principal queja de los espectadores franceses es que al jugador, por solo pararse en la cancha le pagan 1.200 euros por haber disputado la primera ronda. Más allá de esta situación, el francés viene demostrando un tenis irregular en el que no logró ganar más de dos partidos consecutivos. 

No es la primera vez que tiene una actitud polémica. En 2020,  Benoit Paire, quien había sido marginado del US Open tras haber dado positivo de coronavirus, había hecho una revelación sorprendente: la organización del ATP de Hamburgo le permitió jugar pese a que su test había vuelto a dar positivo. En aquel entonces, el jugador de 31 años abandonó en su debut en el torneo alemán cuando caía 6-4 y 2-0 frente al noruego Casper Ruud y, en la conferencia de prensa posterior, admitió que jugó pese a estar contagiado.

“Le quiero dar las gracias al médico y al torneo, ellos me dejaron jugar. Di negativo ayer, pero en otras dos pruebas di positivo. La regla aquí es diferente, así que la ATP tiene que explicar cuál es la regla. En París hay jugadores que han dado negativo pero como su entrenador ha dado positivo, no pueden jugar. Aquí en Alemania das positivo y sí puedes jugar”, reveló el francés.