Horacio Accavallo: del boxeo como herramienta para salir de la pobreza a su lucha contra el Alzheimer
El ex campeón del mundo en la categoría 'mosca' falleció el 14 de septiembre pasado, justamente en el 'Día del Boxeador' y tras 'guantear' mano a mano contra la enfermedad neurológica durante la última década. Bajo el lema 'No colguemos los guantes frente al Alzheimer' se llevó a cabo una emotiva velada de boxeo en La Fábrica De Box en homenaje al mítico boxeador. Se realizó en Valentín Alsina, el barrio donde vivió el ex campeón del mundo. La palabra de Horacio Jr. recordando a su padre.
Horacio Accavallo, ex campeón del mundo en la categoría 'mosca' falleció el 14 de septiembre pasado, justamente en el 'Día del Boxeador' y tras 'guantear' mano a mano contra la enfermedad neurológica durante la última década. Bajo el lema 'No colguemos los guantes frente al Alzheimer' se llevó a cabo una emotiva velada de boxeo en La Fábrica De Box en homenaje al mítico Horacio Accavallo. Se realizó en Valentín Alsina, el barrio donde vivió el ex campeón del mundo.
El evento que se desarrolló el sábado por la noche en el conurbano tuvo 14 encuentros amateurs y se cerró con una pelea entre dos boxeadores de peso mosca, la misma que Accavallo. El hijo del Campeón Mundial, Horacio Accavallo Jr, fue el encargado de llevar adelante la velada y junto a la empresa de Comunicación Amén Argentina y Sergio Pollaccia organizaron el emotivo homenaje, para el apoyo de la Asociación Gama que ayuda a familiares de pacientes con esa enfermedad. Horacio Jr. recibió una placa conmemorativa de parte de la Secretaría de Deportes del Municipio de Lanús y una carta reconocimiento de la WBC.
En diálogo con Doble Amarilla, Accavallo hijo reconoció que el evento forma parte de una fuerte campaña que lleva adelante junto con la empresa mencionada y que busca visibilizar la lucha contra el mal de Alzheimer y sobre todo brindar ayuda y contención a los familiares y cuidadores de las personas que la padecen.
"El evento lo venimos organizando hace más de un mes. Por Instagram no pusimos en contacto con Sergio Pollaccia de la Agencia Amén, un fanático del boxeo, y me preguntó por mi papá. Cuando le conté que tenía Alzheimer, él me comentó que su madre había fallecido por la misma enfermedad" y agregó: "Nos pusimos de acuerdo en llevar adelante una campaña y usar a mi papá como medio para poder llegar a más personas y concientizar sobre esta cruel enfermedad".
En el mismo sentido Accavallo sostuvo: "Mi papá había hecho varias campañas con la Asociación Gama, que ayuda a pacientes, cuidadores y familiares a sobrellevar esta enfermedad y dentro de la campaña organizamos esta velada con dos pesos mosca como mi papá para darle visibilidad pero mi papá falleció el 14 de Septiembre. Pasé dos días bastante duros pero decidí seguir adelante con el evento como homenaje a mi viejo" y sentenció "Sabemos que es una batalla perdida contra esta enfermedad pero tenemos que pelearla".
Horacio Jr. recordó el amor de su padre por Racing y cómo se gestó aquella relación: "Mi papá viajó a pelear por el título del mundo (la pelea fue el 1 de Marzo de 1966) y en el mismo avión estaba Sacol que en ese momento era el Presidente de Racing, además de Eduardo Falú y 'Tito' Lectoure. Sacol le regaló la bata de Racing a mi papá y el ingresa al ring con la bata de Racing y la gente de Racing siempre se lo agradeció. Mi papá era fanático".
El hijo del ex campeón rememoró la historia de vida de su padre y cómo utilizó al boxeo como herramienta para salir de la pobreza: "Mi papá antes de ser boxeador, fue cartonero, botellero, fakir, malabarista y desde siempre fue un gran comerciante. El buscaba el mejor vidrio para vender. Era muy pobre y siempre me contó que buscó el boxeo como un medio para salir de la pobreza" y el relato continúa: "Entonces se lo tomó muy en serio. Se retiró muy joven porque le costaba dar mucho el peso y se llegaba muy tarde a la posibilidad de ser campeón del mundo a él le llego recién a los 31 años. Realizó tres defensas y teniendo una pelea pendiente organizada por Lectoure prefirió retirarse diciendo 'seré campeón por siempre'". La historia culmina con un emotivo recuerdo: "Después de retirarse volvió a ser comerciante a dedicarse a sus negocios como hizo siempre hasta vendiendo sus entradas para la veladas en el Luna Park".