El próximo domingo, Independiente recibirá a Belgrano en Avellaneda en medio de una crisis deportiva y de una situación institucional cada día más compleja. 

A pocos días del encuentro, hay una enorme preocupación en los organismos de Seguridad por posibles consecuencias en caso de que el resultado, una vez más, no acompañe, según pudo saber Doble Amarilla. Más allá de esto, descartan un cambio de horario y ratifican que hay voluntad de ambas partes de jugarlo tal lo estipulado (18 hs).

Incluso, en los últimos días, hicieron un exhaustivo trabajo en redes sociales por la cantidad de amenazas que circulan en la red social ‘Twitter’ y entienden que la situación está cada vez más complicada. 

En uno de los últimos encuentros de local, frente a Estudiantes, los hinchas explotaron de furia contra todo el plantel, tras la derrota. Salvo Pedro Monzón, el entrenador interino de ese entonces, nadie se salvó de los insultos y las reprobaciones. Todo esto decantó en la renuncia de Fabián Doman, la caída en la llegada de Repetto y la asunción de Zielinski. 

Este miércoles será la reunión de coordinación entre las fuerzas policiales y autoridades de la institución, donde le comunicarán al club que los hinchas no podrán ingresar ni con bombos ni con banderas. Además, con el operativo de seguridad, el cual tendrá cerca de 600 efectivos abocados, buscarán evitar que el micro del plantel no tenga contacto con los simpatizantes.