Matías Messi aceptó la culpa por portar un arma en un juicio abreviado: fue condenado y no irá a la cárcel
El hermano de "La Pulga" no irá a prisión y sí realizará tareas en una escuelita de fútbol. Así quedó establecido luego que el acuerdo judicial mediante el cual el hermano del crack del Barcelona admitió el delito. Por el hecho, fue penado con dos años y seis meses de cárcel, pero quedó en libertad.
(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Matías Messi, hermano mayor de Lionel Messi, crack del Barcelona y de la Selección Argentina, fue condenado a dos años y seis meses de prisión por la tenencia ilegal de un arma de fuego. Sin embargo, no irá a prisión y quedó en libertad.
Así lo estableció la Justicia, luego que Matías admitiera la tenencia del ilegítima arma. En cambio, deberá realizar tareas en una escuelita de fútbol. Todo quedó sentenciado tras un juicio abreviado, mediante el cual la defensa del familiar de "La Pulga" pudo llegar a un acuerdo con la Fiscalía.
Ahora, según informa "La Capital", deberá cumplir con reglas estrictas como, por ejemplo, fijar residencia estable que no podrá variar sin dar aviso a la Secretaria de Control y Asistencia Pos Penitenciaria, someterse a tratamiento psicológico y cumplir con tareas comunitarias. Así, por disposición judicial Matías Messi deberá destinar ocho horas mensuales a la escuelita de fútbol "Los leones", de Perú 2173.
En la misma resolución también se mencionan órdenes más de rigor para este tipo de casos como la de evitar el consumo de alcohol, drogas y protagonizar hechos delictivos.
Así, se cerró el capítulo que empezó el pasado 31 de noviembre, cuando Matías Messi había protagonizado un confuso episodio a bordo de una lancha en el Paraná. Allí, luego de la colisión contra un banco de arena, sufrió heridas en la cara, pero pudo acercase hasta la orilla para pedir ayuda.
Mientras era atendido en un centro médico, la policía allanó la embarcación y allí encontró la pistola 9 milímetros que el hermano del futbolista no pudo acreditar como suya. Es más, en la audiencia, lo único que dijo Matías cuando pudo hablar fue que el arma no era suya.