Una alcantarilla mal sellada obliga a suspender las pruebas en el Gran Premio de Azerbaiyán
De manera inesperada, una tapa de alcantarilla provocó la suspensión de las "series" en el circuito callejero de Baku. ¿Por qué pudo haber sido mucho más grave de lo que pasó? El antecedente de Jenson Button, hace unos años en el GP de Mónaco.
(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Una alcantarilla mal sellada obligó a la Dirección de Carrera del Gran Premio de Azerbaiyán a dar por “terminados los Libres 1”. Sucede que una de las alcantarillas se levantó y pudo causar una tragedia. Ahora, se revisará la pista y se limpiará la superficie. El levantamiento de la tapa generó importantes daños en el Williams del piloto británico George Russell.
¿Por qué sucede esto? El de Baku, así como el de Mónaco, es un circuito callejero. Por lo tanto, hay alcantarillas en su trazado. En la F-1, estas alcantirallas, para no se levanten, son sometidas a un procedimiento especial de "sellado desde abajo". Evidentemente, la que dañó al monoplaza de Williams no estuvo bien sellada.
El peligro de esto es que los autos, al andar a velocidades superiores a los 250Km/h tienen un "efecto suelo", de lo contrario, no tendrían agarre y saldrían volando, literalmente, del circuito. El auto ejerce presión contra el suelo, para mantenerse adherido y va "chupando" a su paso. Así, si la tapa está floja, el auto la aspirará a su paso. Eso pudo haber generado un accidente aún peor del que se generó.
Lo que ocurrió se debe a una grave falla de seguridad del cricuito de Baku y, por eso, se resolvió suspender toda la actividad hasta poder chequear, efectivamente, todas las alcantarillas.
Un mensaje difundido en el perfil de Twitter de la Fórmula 1 confirmó la suspensión definitiva de la primera ronda de entrenamientos libres: “Los Libres 1 no se reanudarán. La sesión ha terminado, por lo que se puede revisar la pista y limpiar el aceite de la superficie”, indicó la categoría.
Según se pudo saber, la tapa se empezó a salir con el paso de la Ferrari de LeClerc y terminó de levantarse con el paso de Russel, quién se llevó la peor parte. "Esto no es lo que esperas de un circuito de Fórmula 1", manifestó, furiosa, la directora del equipo Williams: "Vamos a hablar con el control de carrera", apuntó.
Williams también llevó tranquilidad al explicar que "George Russell está bien". "Tendremos que esperar a ver el coche para evaluar la extensión de los daños y ver si podemos reparar el chasis o pasar al tercer chasis”, comentó desilusionada con lo ocurrido.
En el GP de Mónaco, en 2016, Jenson Button sufrió un incidente similar, al impactar contra una alcantarilla levantada por otro piloto. Su McLaren sufrió al destrucción del alerón delantero y pinchó una goma. "Tuve suerte, pero es un incidente que no quiero volver a ver", manifestó el británico.