Se abre una novela con ribetes de negocio, traición, sábanas y un personaje oscuro del fútbol. Una de las parejas del ambiente futbolístico llegó a su fin. Se trata del mediocampista y crack de Vélez, Fabián “Poroto” Cubero, y Nicole Neumann. Según informó este mediodía la periodista Yanina Latorre, en Canal 13, el motivo de la separación es que la modelo estaría en una relación con el representante de jugadores Pablo Cosentino.

Cubero confirmó la separación de Nicole Neumann. Luego se desató el escándalo.

La bomba que tiró la esposa de Diego Latorre caló rápido en el mundo del fútbol por los perfiles de los protagonistas masculinos. Mientras que Cubero es un hombre muy querido en el ambiente, Cosentino cosecha enemigos tanto en el círculo local como en Italia, donde su apellido quedó en el medio del escándalo de arreglo de partido del club Catania.

Cosentino junto a su esposa la modelo Daniel Urzi.

Según Latorre, Cosentino está separado de su esposa la también modelo Daniel Urzi y en las últimas horas se lo habría visto caminando por las calles de Milán, lugar de residencia, junto a Neuman. Además, relató que hace unos meses habrían tenido un encuentro en Nueva York.

Vida polémica y relacionada full al fútbol

Hasta que decidió renunciar a su condición de agente FIFA, Cosentino realizó transferencias de jugadores y trabajó junto con agentes conocidos como argentino Gustavo Mascardi y Hugo Issa. Fue representante, entre otros, de Caniggia, Coloccini, Milito y Lavezzi, y llevó a muchos futbolistas al Italia: Silvestre, Schelotto, Larrivey, Vázquez, Fontanello, Barrientos, Castro, Leto y Faurlin, entre otros.

Cosentino formó parte del entorno de Diego Maradona y amigo de Guillermo Coppola. Incluso, tuvo que declarar ante la policía uruguaya cuando en enero de 2000 Maradona sufrió una duerte descompensación en Punta del Este. También tuvo una estrecha relación con Daniel Passarella mientras fue presidente de River lo que le valió la bronca de muchos personajes del mundo millonario.

Cosentino en su época como alto dirigente del Catania, un periplo complicado en su carrera. Estuvo detenido acusado de arreglar partidos. Luego fue absuelto.

Su momento más complicado lo vivió hace un par de años cuando fue acusado junto al presidente del Club Catania, Antonio Pulvirenti, y otras cuatro personas de estafa y fraude deportivo, por haber comprado partidos del campeonato de Serie B, con el objetivo de evitar el descenso de categoría del equipo italiano. El fiscal Giovanni Salvi señaló que al menos fueron cinco los partidos que habrían sido ganados mediante el pago de dinero. Sin embargo, apenas declaró Pulvirenti eximió al empresario argentino de toda responsabilidad y éste quedó en libertad aunque estuvo hasta junio de 2015 con arresto domiciliario.

Casado desde 2008 con la bellísima modelo Daniel Urzi, la pareja pasa su vida entre Milán, Miami Punta del Este. Tras su salida del Catania mantuvo los negocios con diversos clubes, principalmente con el Milan.