Un grupo de hinchas del Flamengo llegó anoche hasta el hotel donde se hospeda el plantel de Independiente para llevar adelante una vieja práctica: arrojar pirotecnia y hacer todo el ruido posible para no permitirle a los jugadores del Rojo tener un buen descanso.

Pero las cosas pasaron a mayores cuando comenzaron a generar disturbios. Tiraron abajo las vallas y se pelearon con la seguridad privada del hotel.

Conmebol condenó la situación a través de Twitter, mientras que desde Independiente, lejos de calmar las aguas, utilizaron las redes sociales para enviar un mensaje provocador a los hinchas del Flamengo.

Ampliar contenido
Ampliar contenido