El presidente de la Confederación Africana de Fútbol acusado de corrupción y acoso sexual
Ahmad Ahmad fue denunciado por su propio secretario general, Amr Fahmy ante la FIFA. Entre los delitos figuran el pago de soborno, el despilfarro en alquiler de autos, entre otros. Además, lo culpan de no renegociar el contrato de los derechos de televisión.
(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) El presidente de la Confederación Africana de Fútbol (CAF), Ahmad Ahmad, fue acusado de corrupción y abuso de cargo ante la FIFA por su secretario general, Amr Fahmy. Entre la denuncia enviada en marzo figuran el pago de sobornos por U$S 20.000 a presidentes de federaciones africanas, aumentar en 830.000 el costo de una serie de equipamientos adquiridos por la CAF para pagar a Tactical Steel, una empresa de intermediación francesa, además de despilfarrar más de U$S 400.000 en alquiler de autos en Egipto y Madagascar, según informa El Confidencial.
Además, Ahmad deberá enfrentarse a las acusaciones de presunto acoso sexual a cuatro empleadas de la CAF y de justificar su decisión de despedir a Fahmy. Esto generó malestar en la confederación ya que, tras 26 meses en el cargo no cumplió ninguna promesa que realizó.
La promesa más importante que realizó fue la revisión de los contratos por los derechos de televisión firmados por su predecesor, Issa Hayatou, con Lagardère Sports hasta 2036. Estos lazos fueron el detonante de la caída del dirigente camerunés, a quien el tribunal de El Cairo le impuso una multa de U$S 57 millones, además de solicitar la invalidación de los contratos, según informa el medio.
Pese a asegurar que iba a revisar ese compromiso, las decisiones de Ahmad fueron en dirección contrarias, ya que estrechó más lazos con la empresa Lagardère y su director en África, Idriss Akki, con quien realizó una peregrinación a La Meca.
En tanto, los derechos de retransmisión de las competiciones sigue sin resolverse. La Copa de África, pronta a comenzar, no tiene nada acordado lo cual significa un gran perjuicio económico para los países participantes, y en particular para Egipto, el país organizador. Se estima que el valor de los derechos será de aproximadamente U$S 100 millones, tras aumentar la cantidad de partidos y cambiar la competencia al verano, lo cual significa un valor de marketing mayor por no cruzarse con las ligas europeas.