El PSG le comunicó a Neymar y Verratti que no los tendrá en cuenta
De esta manera, el brasileño y el italiano deberán buscar a contrarreloj otro destino para esta temporada que se inicia.
Los directivos del equipo francés Paris Saint Germain les comunicaron este miércoles al astro brasileño Neymar y al italiano Marco Verratti que no serán tenidos en cuenta para la temporada que se iniciará en los próximos días.
Según la prensa francesa, el manager del club Luis Campos y el entrenador Luis Enrique convocaron a Neymar y a Verratti a sus oficinas y les comunicaron que no los tendrán en cuenta en la temporada 2023-2024 y que les están buscando club.
La decisión sobre Neymar se suma a la salida del argentino Lionel Messi y el conflicto con el francés Kylian Mbappé, que no se entrena con el plantel profesional por decisión del club. De esta manera, el club parisino, controlado por capitales qataríes, se quedará sin sus tres máximas figuras.
Campos y Luis Enrique también desafectaron al portugués Renato Sanches, al francés Hugo Ekitike y al español Juan Bernat, además del argentino Leandro Paredes, que se está buscando club tras volver de un préstamo en Juventus.
A todos estos jugadores se les pidió que no participen del “Media Day”, que se realizó hoy y en la que cada club se toma las fotos y filmaciones oficiales para el marketing y las publicaciones de la Liga Francesa.
En el caso de Neymar, el padre del brasileño había solicitado este fin de semana que su hijo salga del club francés, aunque el principal escollo para conseguir nuevo club es el salario que percibe en el PSG, considerado de los más altos del mundo.
Un par de clubes de Arabia Saudita consultaron por el brasileño, pero se espantaron ante su sueldo, pero además el futbolista formado en Santos, de Brasil, no parece estar muy interesado en abandonar la elite del futbol mundial para jugar en una liga de tercer o cuarto nivel.
La posibilidad de volver al Barcelona entusiasma al padre de Neymar, que es su manager, pero la realidad del club catalán, que debe cumplir las exigencias del "fair play" financiero, hacen muy dificultosa su llegada.