La Interpol informó este martes del arresto de 1.400 personas en cerca de treinta países durante la octava operación contra las apuestas fraudulentas en el fútbol, en la que se incautaron €7,9 millones de euros en efectivo.

En esta operación, donde participaron países europeos y asiáticos, también se decomisaron computadores y teléfonos portátiles asociados a apuestas por valor de €465 millones.

Hong Kong fue uno de los epicentros. Allí la Policía incautó €2,7 millones en cash y detuvo a más de 800 sospechosos, entre ellos uno de los supuestos líderes de un grupo de apuestas. Muchas de ellas estaban asociadas a los partidos de la pasada Eurocopa. En Italia también se llevó a cabo una operación gran envergadura.

Todo lo realizado se enmarcó bajo el nombre de "SOGA VIII" y fue coordinada por la unidad contra los delitos financieros y la anticorrupción de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), con la ayuda del grupo especializado en crímenes organizados para la región de Asia-Pacífico y con la unidad de Interpol sobre el amaño de partidos.

"Las apuestas ilegales generan enormes beneficios para las redes criminales, como el lavado de dinero o la corrupción", indicó el organismo internacional con sede en la ciudad francesa de Lyon.

Hasta el momento, las diferentes operaciones SOGA han resultado en 19.100 detenciones, el decomiso de 63 millones en metálico y más de 4.000 apuestas ilegales que movieron 7.300 millones de euros.