Inglaterra se lució en el estadio Khalifa y aplastó a Irán en un partido lleno de goles
El combinado europeo se impuso por 6-2 por la primera fecha del Grupo B. Los goles los marcaron Jude Bellingham, Bukayo Saka (2), Raheem Sterling, Marcus Rashford y Jack Grealish; para el rival convirtió Mehdi Taremi por duplicado. El arquero del combinado de Medio Oriente debió ser reemplazado en la primera etapa por un duro golpe en la nariz.
Inglaterra se lució en su debut mundialista y goleó 6-1 a Irán en el estadio Khalifa, por la primera fecha del grupo B. Jude Bellingham, Bukayo Saka (2), Raheem Sterling, Marcus Rashford y Jack Grealish. convirtieron los goles del seleccionado europeo. En tanto, para el combinado de Medio Oriente marcó Mehdi Taremi.
Un Khalifa International Stadium colmado recibió a Inglaterra e Irán en el primer partido del grupo B. Con mayoría de público inglés, pero con iraníes en gran número, el equipo de Soughate salió a ser protagonista teniendo la pelota aunque Irán aplicaba una presión incisiva para tratar de recuperar rápido y jugar directo desde el minuto cero.
El equipo inglés utilizó las bandas para hacerse ancho y tratar de evitar esa línea de cinco defensores que proponía el conjunto asiático y Harry Kane se movía por todo el frente de ataque buscando perder referencia de las marcas y poder filtrarse, incluso muchas veces siendo asistidor. Queiróz planteó un 5-4-1 bien claro en el campo, para tratar de contrarrestar el buen pie de Mount, Bellingham y la velocidad de Sterling, algo que le funcionó hasta los 30 minutos de juego.
A los 13 minutos el arquero Beiranvand cayó con una molestia luego de un choque, intentó seguir pero solo 5 después volvió a tirarse para pedir el cambio, para que ingrese Hossein Hosseini en su lugar, algo que preocupa a Queiroz sobre todo de cara al futuro de esta copa, ya que podría perderlo por lesión.
Irán se preocupó mucho por defender y cuando podía, atacaba de forma tibia, moviendo la pelota y tratando siempre de generar una pelota parada, una de las mejores armas que tiene aunque esta vez fue poco productivo en este aspecto.
Sala era por derecha el más determinante del equipo inglés, entraba en contacto con el balón seguido pero era siempre bien tomado por la defensa iraní, que eligió en muchos tramos del encuentro el foul táctico de corte cerca de la mitad Cerca de los 30 minutos, llegó la más clara del partido.
Un córner desde la izquierda de Sterling fue directo a la cabeza de Kane, que rompió el travesaño con un cabezazo para que luego, inmediatamente en la jugada posterior un centro pase desde la izquierda de Luke Shaw, le dejó servido el cabezazo a Bellingham que apareció en posición de centrodelantero y cambió el palo para poner el 1-0 a favor de Inglaterra, que ya era más que su rival.
Desde el gol, el conjunto de Southgate manejó los tiempos a su gusto y encontró muchos más espacios. A los 42, un córner izquierdo de Shaw cayó en la cabeza de Harry Maguire, que la bajó para la llegada de Bukayo Saka, quien de izquierda fusiló al ingresado Hosseini y marcó el 2-0 previo al término del primer tiempo, un golpe letal para los iraníes.
Un minuto y medio después, Harry Kane se vistió de asistidor y desde la derecha tiro un centro para la aparición de Sterling en un contra tremenda que dejó KO al equipo de Queiróz y ya casi sin reacción. El segundo tiempo arrancó de igual forma, con Inglaterra adelantada y el dominio total del partido.
El nerviosismo de Irán llevó a los asiáticos a muchas veces pegar de más y muy fuerte, siendo Harry Kane una de las principales victimas. Tan maniatado lo tenían los ingleses a los asiáticos que a los 17 del ST, otra vez saka recibió pero ahora desde la derecha y con una jugada individual desde ese sector hacia el centro, definió cruzado por abajo de zurda, para marcar el 4-0 ante una parsimoniosa defensa iraní.
Dos minutos después, en una jugada aislada (la primera colectiva del equipo de Queiroz) filtraron un pase para la llegada de Mehdi Taremi que definió con la punta de botín, para que luego del rebote en el travesaño la pelota ingrese para marcar el 4-1. A esta altura, los 5 goles enloquecían a los aficionados en el Khalifa, incluso a los iraníes que se levantaron ante este descuento del 9 de su equipo. 25 minutos del ST e Inglaterra mando a la cancha a Foden, Dier, Grealish y Rashford (vaya si tiene recambio).
Este último, de derecha hacia el medio y casi sin resistencia definió de zurda y marcó el quinto gol inglés para sentenciar definitivamente cualquier pequeña esperanza iraní. A los 30 del complemento, se retiró muy aplaudido Harry Kane, que no sumo goles pero que ha sido determinante en el juego por la movilidad en el ataque y así se lo hicieron saber los hinchas ingleses.
Callum Wilson ocupó su lugar. Cerca del final, una contra de tres toques dejó solo con campo para correr a Rashford, que no se apuró y sacó provecho de su velocidad para llegar al fondo y centrar atrás x lo bajo para que Grealish solo tenga que empujarla para el 6-1.
Sobre el cierre, el árbitro del partido fue asistido por el VAR y marcó penal a favor de los iraníes, lo que solo sirvió para gritar un gol de consuelo que también fue marcado por Taremi.
Inglaterra destrabó un duro partido con una pelota parada y luego lo manejó a su antojo, demostrándo la clara diferencia en la jerarquía individual y esobre todo en el gran recambio. Triunfo importante además por la diferencia de gol, el equipo europeo se acomoda en el grupo B y demostró porque es uno de los candidatos para muchos.