La irrupción de la Superliga Europea de Clubes en el centro del debate provocó una andanada de reacciones en el planeta fútbol. Y, luego de las declaraciones uno de los principales funcionarios de la organización del torneo, que aún debe pasar varias requisitorias legales para poder ver la luz, la respuesta de LaLiga fue contundente.

Javier Tebas, el actual presidente de LaLiga de España, fue quien recogió el guante. El mandamás del torneo español reaccionó con un mensaje en la red social 'X' (exTwitter) a la entrevista que el CEO de A22 Sports Management, Bernd Reichart, le dio al medio catalán Mundo Deportivo. 

Reichart viene realizando algunas presentaciones y entrevistas desde que el pasado 21 de diciembre, el Tribunal Europeo dio luz verde a la creación de la Superliga al considerar que las reglas FIFA y UEFA sobre la aprobación previa de competiciones de clubes son contrarias al derecho europeo. La máxima instancia administrativa de la Unión Europea consideró que la UEFA y la FIFA abusaron de "posición dominante" en su actuación contra la creación de la polémica Superliga de fútbol.

En la entrevista, el ejecutivo alemán dejó varias frases que hacían referencia a la Liga. El teutón comentó que "la Superliga revitalizará las ligas domésticas", ya que la competición "hace que los clubs crezcan en recursos económicos y, de este modo, hacen mejores plantillas y retienen a sus talentos, lo que mejora el nivel de la liga doméstica"

Además, el directivo lanzó un mensaje directo al presidente de LaLiga en el mismo sentido. "Me gustaría que Tebas se abriese a una opción que puede fortalecer su competición".

X de Javier Tebas Medrano

A esta declaración el presidente de LaLiga respondió "En 2019 ya nos intentaron "colar" un formato de competición muy similar al que ahora propugna @A22Sports pero este aún es peor. No conseguiréis engañarnos", escribió Tebas en su cuenta oficial de 'X', añadiendo los "emojis" que hacen referencia a Pinocho y también con un vídeo en que se critica el formato propuesto de la Superliga por considerar que no es meritocrático el método de clasificación, dado que los clubs no se clasificarían para esta competición por sus méritos en las competiciones nacionales, lo que "aniquilaría el fútbol europeo" y provocaría "que las ligas domésticas carecerían de interés".