Jugó con Cristiano Ronaldo, se retiró a los 24 años por una lesión y hoy se dedica a los negocios
Era una gran promesa, pero un terrible inconveniente con su tobillo lo obligó a dejar el fútbol. Encontró el éxito vendiendo relojes.
Cuando dio sus primeros pasos en el fútbol, lo vieron como una gran promesa y llegaron a llamarlo "el nuevo Ryan Giggs". En aquellos años tuvo el privilegio de compartir plantel con Cristiano Ronaldo y otros cracks. Por desgracia, una gravísima lesión frustró su futuro. Sólo en lo deportivo, porque terminó siendo exitoso de otra manera.
Ramon Calliste se destacó en las divisiones formativas del Manchester United y llamó la atención de Alex Ferguson, quien en 2004 lo subió al primer equipo. Allí pudo participar de las prácticas junto a grandes estrellas como Cristiano, Wayne Rooney, Ruud Van Nistelrooy y Paul Scholes, entre otros.
Con tantas figuras, nunca tuvo la oportunidad de aparecer en la Premier League. Fue así como decidió marcharse al Liverpool en busca de minutos, pero tampoco pudo debutar. El destino lo llevó a probar suerte en el Scunthorpe United. Estaba todo dado para que, ahora sí, pudiera tener continuidad. Sin embargo, el destino le puso un freno…
Del fútbol a los negocios: la historia de Ramon Calliste
Calliste se dislocó el tobillo, se fracturó y sufrió una lesión severa en los ligamentos. Tan grave fue su dolencia que tuvo que retirarse del fútbol muy joven, a los 24 años. Su futuro siguió lejos de las canchas, pero supo encontrar el éxito en los negocios: fundó una empresa de relojes.
"Empecé a involucrarme en la relojería a través de los contactos que tenía por el fútbol. Una vez que vi que podía convertirse en un negocio viable, creé Global Watches en 2013 y se ha convertido en una empresa realmente fuerte que ahora está facturando millones", dijo Calliste en una entrevista realizada hace algunos años.
Actualmente, el ex Manchester United tiene una ganancia que supera lo que cobran varios futbolistas. Gana cerca de 5 millones de dólares al año y tiene una vida de sueño en Dubai, desde donde administra su negocio en Londres.
"Al final, el fútbol simplemente no era para mí. Con toda la habilidad que tenía, simplemente no era mi destino. No habría conocido a mi esposa, no habría conocido a mis hijos porque no habría venido a Londres en el momento en que lo hice", destacó.