La justicia francesa lleva adelante una investigación por el presunto delito de tráfico de influencias sucedido mientras el PSG intentaba cerrar el fichaje de Neymar a cambio de más de € 222 millones.

Los investigados son el ex vicepresidente de la Asamblea Nacional gala, Hugues Renson, del partido del presidente, Emmanuel Macron, y un alto directivo del PSG y por entonces, director de comunicación, Jean-Martial Ribes. 

Los investigadores creen y deberán probar que Renson pudo maniobrar para que el PSG obtuviera ventajas fiscales en el pago de la cláusula del brasileño al Barcelona para ficharlo y a cambio habría recibido abonos para estar en el Parque de los Príncipes y otros beneficios.

Según varios medios, los investigadores poseen numerosos intercambios telefónicos entre Renson y Ribes.

Renson interrogaba a varios ministros y, posteriormente, rendía cuentas a Ribes con quien se reunió en diversas ocasiones, algunas de ellas en presencia del presidente del PSG, Nasser Al Khelaifi.