En lenguaje netamente del español castizo, podría decirse que Kylian Mbappé "la lió" este domingo con la brutal plancha que le aplicó a Antonio Blanco y que derivó en la roja directa que lo hizo irse al vestuario antes del cierre del primer tiempo en la vista de Real Madrid a Alavés.

De este modo, el Merengue se privó de una pieza de ataque fundamental que ya le reportó 22 goles en esta temporada y que experimentó su primera expulsión desde que llegó a España.

La jugada, inicialmente pasada por alto por el árbitro César Soto Grado, fue revisada por el VAR, que mostró un claro pisotón del galo, considerado intencional por su vehemencia.

Poco tiempo antes, a los 34', Eduardo Camavinga había colocado el 1-0 que a pesar de la desventaja numérica los de Carlo Ancelotti pudieron sostener hasta el final. La Casa Blanca permanece a 4 puntos del líder Barcelona, que tiene 66 en la liga.