River está a pocas horas de conocer a su nuevo presidente y poner fin a un ciclo de 8 años con Rodolfo D'Onofrio al mando. Como candidatos, aparecen Jorge Brito, Carlos Trillo, Luis Belli y Antonio Caselli, quien busca retener su histórico segundo lugar en el panorama político del club de Núñez. Lo cierto es que los últimos meses han sido turbulentos y viene de tropiezo en tropiezo.

Todo inició con la fallida travesía en el Burgos, que terminó en fracaso económico. Hace casi cinco meses, a través de un comunicado oficial, la institución española puso fin a la etapa de los dirigentes argentinos luego de dos años. Según Diario de Burgos, en la junta general de accionistas en la que se dio el "traspaso" del control, se adelantó que la deuda del Burgos CF ascendía a alrededor de €6 millones.

Antes de la salida de los Caselli, hubo movimientos importantes y profundos. Estos se precipitaron luego de un comunicado emitido por el plantel, en el que se denunciaba falta de pago y la respuesta por parte de la familia argentina, que no satisfizo ni a hinchas ni a organismos a los que la entidad debía dinero. Debió, inclusive, recurrir al ERTE en España. Con ese escenario, los dirigentes ligados a la oposición de River perdieron el 85% del paquete accionario, pasando de tener un 95% a un 10%.

Mientras el paso de Caselli por Burgos llegaba a su fin, su espacio se fragmentaba. El punto de quiebre se dio el pasado sábado 8 de mayo, cuando tres hombres que respondían al candidato de Primero River presentaron sus renuncias a la comisión fiscalizadora: Horacio Roncagliolo (fiscalizador titular), Nicolás Fantasía Macchi (suplente) y Daniel Lisera (titular).

Mediante una carta de toma de conocimiento, estos indicaron que en la última reunión de bloque "quedaron evidenciadas un cúmulo de diferencias de criterio, destrato y faltas de respeto inadmisibles que se traducen en cuestiones irreconciliables".

Meses después de que el espacio de Caselli sufriera varias bajas, los espacios opositores Frente X River Plate (liderado por Carlos Trillo) y Somos Comunidad River (conducido por Matías Barreiro) anunciaron una sorpresiva alianza para ser la primera alternativa al oficialismo. Esa jugada inesperada puso en jaque al referente de la oposición durante el ciclo presidencial de Rodolfo D'Onofrio.

Según los sondeos que circulan en la política de River, el oficialismo será ganador de la contienda electoral por amplio margen.  Pero lo que todavía no se termina de definir es quién será la principal fuerza opositora que controlará el ejercicio de la próxima dirigencia de River. En los últimos tiempos, Caselli se ubicó como la segunda opción ante un oficialismo blindado por los éxitos deportivos durante el ciclo Marcelo Gallardo. Si bien en las consultas aparece como segunda opción, los encuestadores advertían sobre un posible giro en caso de que la oposición lograra presentarse como unidad. Las encuestas marcaban que, en caso de unirse Trillo y Barreiro, superaban en intención de voto a Caselli.

La unidad del Frente X River Plate y Somos Comunidad River podría poner en jaque a un Caselli desgastado que tuvo que recurrir (nuevamente) a la figura de David Trezeguet para poder generar cierta atracción en el electorado millonario. Puertas adentro, su espacio opositor se fue resquebrajando por las diferencias políticas y la falta de un sentido común para marcar contrapuntos a la gestión D’Onofrio. Sin ir más lejos, se distanció en el último tiempo de Luis Belli, Luis Cejas y el propio Juan Ignacio Napoli, que se alejó de la política partidaria de River.

Cabe recordar, que además de la figura de Trezeguet, Caselli buscó un salvavidas dentro del terreno político: el puntano Nicolás Rodriguez Saa, actual diputado nacional por el Frente de Todos, quien será su candidato a vicepresidente segundo.

En los últimos días, el candidato de Primero River generó más polémica respecto a una decisión que dijo que tomaría en caso de asumir como mandamás de la institución: echar al actual mánager Enzo Francescoli. "Dejó libre a 45 jugadores, su gestión no fue buena", aseveró, generando sorpresa en propios y extraños. Por lo pronto, mientras se acerca la elección, los sondeos marcan cada vez con más fuerza que Caselli puede perder ese segundo lugar que mantuvo históricamente.