La rosca que se viene en AFA: entre la trinchera y los interrogantes
La clasificación alivia a Tapia y lo empodera. Cómo sigue la batalla y las dudas que se abren. Los que aspiran a volver, pero esconden un pasado oscuro en AFA. Jugadas de ajedrez y ordenamiento de tropas.
“Si perdemos hoy se va todo a la mierda…..”, “nos están esperando algunos que quieren vernos en el piso”, “ojo que si ganamos Chiqui sale fortalecido”, las tres frases pertenecen a tres diversos referentes de peso en el tapismo horas antes del partido en Ecuador y marcan a las claras que el presidente de AFA se jugaba inclusive su continuidad en el sillón de Viamonte en esta eliminatoria.
Como ya contamos, la grieta en AFA es profunda y la guerra fría entre Claudio Tapia y Daniel Angelici puede pasar a la trinchera en cuestión de días. La armonía y fina diplomacia que se vio entre ambos en los últimos días tenía fecha de caducidad en la noche del martes y hoy son muchos los interrogantes que surgen respecto a cómo seguirá todo. Durante la visita a la Bombonera, Angelici se mostró cercano a la Selección, es más, hizo que varios presidentes de Primera que juegan de su bando lo pidieran como el representante de la Primera División en la albiceleste. Pero en el tapismo preparan una movida de ajedrez que podría dejar mal parado al Tano tal como pasó con la gambeta que le metió Messi a la entrada del vestuario: quieren tentar a Marcelo Tinelli para que vuelva a la órbita de la nacional. Hábil, Tapia entiende que el showman cuervo es un aliado de peso en la batalla que se viene.
El mundo del fútbol sabe que en caso de no clasificar había más responsables que la actual conducción, pese a que ya muchos preparaban discursos fuertes para darle un empujoncito a Tapia. Las vallas puestas en Viamonte ayer para evitar disturbios no tienen que ver con cualquier manifestación espontánea que pudiera darse. Desde la policía metropolitana temían que en caso de no conseguirse el boleto a Rusia, barras infiltrados liberaran una posible “defenestración de Tapia” de Viamonte.
Pero las decisiones que pusieron a la Argentina en el precipicio empezaron un par de años antes. La película resumida en un corto fue así. D’Onofrio, Angelici, Lammens, Tinelli y Blanco renunciaron en un momento clave por cuestiones políticas a la AFA, aunque después algunos volvieron. Los 3 DTs en poco tiempo tienen su explicación. Cuando Martino, quien sin hacer una brillante campaña iba derecho a clasificar al equipo al Mundial, presenta su renuncia, todo se empezó a caer. ¿Pero por qué dimitió? No solo durante la Tesorería de Matías Lammens no cobró un solo centavo en 7 meses, sino que Martino vio que la AFA iba a ser intervenida. ¿Y por qué fue intervenida por la FIFA? Todo comenzó justamente cuando se pusieron de acuerdo los clubes grandes y dimitieron todos a Viamonte. Donofrio a su vicepresidencia primera, Angelici a la secretaria, Lammens a la tesorería, Tinelli a la vice tercera y Blanco a la secretaria de selecciones, cargo que ocupó con mucha honra (y todos los gastos pagos) estando un mes en EEUU junto a su familia acompañando a la selección de Messi que perdió la final de la Copa América del Centenario con Chile por penales. Para ese entonces, todos le habían hecho "bullying" a Tapia y Moyano que se encaminarían luego a ganar la AFA. La caja de la AFA en default con cheques rechazados que aún cuesta levantar, la Selección acéfala y, para peor, la intervención de FIFA que dejó a varios clubes al borde de la quiebra. Mauricio Macri y su IGJ también fueron cómplices de ese momento y de la intervención basada en un confuso informe de la jueza Servini (¿a pedido del Tano?). Luego algunos volvieron. Angelici con más fuerza, ahora haciendo alianzas con quien despreciaba quedándose con la mitad de la torta con su lugarteniente Victor Blanco. Lammens tratando de estar de la mano de Tapia en Conmebol. Y Donofrio y Tinelli en sus casas, pero como si eso alcanzará para eximirlos de culpa y de responsabilidad. En este contexto, el abrazo de Messi a Tapia es un símbolo de peso. Resume que los jugadores saben que esta dirigencia, que arrancó con la polémica decisión de despedir a Bauza, al menos escuchó y complació todos los pedidos de los referentes de la Selección cuando otros le dieron la espalda.
Es cierto que la clasificación empodera a Tapia, pero hay que tener cuidado con el fragor del triunfo. Su entorno no es homogéneo y para una batalla hay que tener a todos los jugadores alineados. Entre sus generales cuenta con cabezas políticas, con especialistas en luchas en el barro pero también recluta algún dirigente impresentable que aprieta con la barra y algún negador constante que flaco favor le hacen a Tapia a la hora de ver el horizonte con claridad.
Los cierto es que se abren varios cuestionamientos ahora que todo indica que el presidente de AFA está para barajar y dar de nuevo. ¿Pasará el tapismo al ataque o intentará suturar la grieta?, ¿el Gobierno seguirá con su embate sutil a Moyano y Tapia?, ¿Tinelli volverá de verdad a la Selección?, ¿Se acercará River a Viamonte o D'onofrio mantendrá ese límite? Tras los festejos se acomodarán los bandos y seguramente empezarán a resolverse algunos interrogantes.