(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Si la decisión de darle libre a los jugadores de Argentina no aumentó en el tono polémico fue por el buen comportamiento de los jugadores. Salvo el episodio de la foto de Ansaldi (en un ámbito privado) y la llegada tarde del propio Ansaldi y Fazio, no se pasó a mayores. Todo giró en torno a los entrenamientos, a si debían descansar o no, y punto. 

Pero en México pasó de todo. Primero, jugaron un partido despedida en el Distrito Federal. El rival: Escocia. El resultado: victoria 1-0. La consecuencia: silbidos y reprobación de la gente que se dio cita en el Estadio Azteca. Todo eso, poco le importó a los jugadores. En la misma noche del partido y días antes de emprender el viaje a Europa para encarar la parte final de la preparación para el Mundial, varios jugadores del plantel realizaron una fiesta privada en una casa. Según indica la revista TVNotas. En el lugar se dieron cita Guillermo Ochoa, Carlos Salcedo, Héctor Herrera, Jesús Gallardo, Giovani y Jonathan dos Santos, Raúl Jiménez, Jesús 'Tecatito' Corona y Marco Fabián, entre otros. Con el paso de la noche (esto se dio el sábado), fueron llegando en taxis varias mujeres invitadas. Arribaban en grupos de cinco y eran recibidas por Herrera. 

Algunas de las mujeres invitadas
Más mujeres llegan a la fiesta

Con el devenir del amanecer, varios jugadores se fueron retirando de la finca, desatando en buena parte del país una polémica a días del Mundial 2018. Cabe destacar que la Selección mexicana es criticada históricamente porque a pesar de contar con una liga fuerte, no logra pasar los octavos de final. Incluso, dicen en ese país, que pesa sobre ellos la maldición del cuarto partido. 

El jugador Herrera recibe a los invitados
Ochoa, arquero y figura de la Selección, sale de la casa, al amanecer