¿Por qué Marcelo Gallardo no jugó en el partido despedida de Ponzio?
Una de las incógnitas que envolvió al 'Mundo River' fue respécto a la no participación del 'Muñeco' en la emotiva despedida del ídolo 'Millonario'.
Sin lugar a dudas, uno de los momentos más emotivos de este año, a nivel local, ha sido la despedida de Leonardo Ponzio del fútbol y su partido homenaje en el Monumental de anoche.
Una fiesta en la cual se dieron cita varias caras conocidas de la historia del 'Millonario' y también varios futbolistas que fueron clave en la gloriosa carrera del mediocampista, que se despidió con la banda roja y ante su gente.
En la noche de Núñez una de las grandes incógnitas que sobrevoló el Monumental tuvo como protagonista al técnico actual del plantel millonario y la imposibilidad de verlo con los cortos.
Marcelo Gallardo fue parte de la fiesta estuvo desde el banco de suplentes dirigiendo, cómo lo hace habitualmente, a River pero sin ser parte de un encuentro en el cual participaron varias glorias y se destacó Enzo Francescoli. Inclusive marcando un golazo con el sello de la jerarquía del uruguayo.
La explicación oficial, respecto a la ausencia del 'Muñeco', estuvo relacionada a que el entrenador sufrió una molestia muscular. Fue hace unos meses cuando Gallardo había disputado un encuentro de fútbol, días antes del partido en el que su equipo debía enfrentar a Aldosivi. Luego del mismo se habían filtrado algunas imágenes del técnico el caminando con alguna dificultad, algo que obviamente llamó la atención del mundo River.
Asímismo otra de las versiones que se filtraron respecto a la ausencia de Gallardo en el partido de anoche, dentro del campo de juego, señalan que la idea del ídolo de River fue la de no opacar la figura de Ponzio en su homenaje y en su propia fiesta. Sobre todo teniendo en cuenta que el entrenador es consciente de la devoción que tiene el hincha millonario hacia él, y entendiendo que lo mejor era ponerse a un costado de una fiesta que era para uno de los protagonistas de la historia moderna de River.
Lo cierto es que (más allá de no estar en el campo y no poder ser parte como futbolista) se vio un Gallardo contento, disfrutando y sonriendo. Quizás como muy pocas veces en el último tiempo se notó que disfrutó del espectáculo. Más allá de que a la gente de River le hubiera encantado verlo destellar gran parte del talento con el cual acostumbró al Monumental, en sus días de jugador.