La letra chica del polémico acuerdo SAD entre Estudiantes y Foster Gillett: firma por 30 años y la entrega del 80% del negocio del fútbol (incluidas las juveniles)
A poco más de un mes para que se trate el acuerdo en Asamblea, hay polémica porque todavía varios dirigentes y socios lo resisten. El Gobierno lo presenta como el puntapié inicial para el “desembarco de las SAD” a través de Tofoni y Santillán. El “Grupo Gillett” pretende quedarse con el 80% de todo lo que genere el fútbol, inclusive los juveniles que ya están formados por el club. A cambio, pondría U$D 150 millones en un lapso de 30 años, lo que para muchos representa un monto muy bajo, ya que son solo U$D 5 millones anuales. Qué pasará con Cristian Medina si el acuerdo no se aprueba en Asamblea. La cláusula oculta que podría permitir a Foster vender su participación en el fútbol de Estudiantes.
La llegada del magnate estadounidense Foster Gillett a Estudiantes de La Plata sigue generando ruido en las diagonales platenses y hay quienes, aún, tanto dentro como fuera del club, miran de reojo la situación. Sea por lo abrumante que suena la cifra de U$S 150.000.000 o por la poca información que entregó hasta el momento la dirigencia que encabeza Juan Sebastián Verón, el acuerdo está en boca de todos.
En las últimas horas y en medio de la polémica por el mismo, el propio Verón rompió el silencio en una entrevista en la que defendió el acuerdo con Gillett, aseguró que no van a hipotecar al club y volvió a disparar contra la Asociación del Fútbol Argentino.
A pesar de ello, quien se encargó de marcar la cancha fue el polémico empresario Guillermo Tofoni. El CEO de World Eleven es el represante del magnate estadounidense en Argentina y, según sus dichos, Estudiantes de La Plata será la primera SAD de la Argentina. Más allá que el presidente del “Pincha” advirtió que esto no ocurrirá, Tofoni y el Gobierno hablaron abiertamente sobre esta figura.
“Pese a la resistencia de algunos sectores, las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) avanzan a paso firme en el fútbol argentino”, comenzó diciendo Tofoni en un posteo que compartió en sus redes sociales, acompañado de una foto junto a Foster Gillett y la diputada Juliana Santillán.
La letra chica del acuerdo SAD: 30 años con una cláusula de salida para Foster Gillett, el 80% del negocio del fútbol de Estudiantes (incluidas las juveniles) y la llegada de Medina ¿con salida inmediata?
A falta de detalles para que se presente en Asamblea a finales de febrero, el acuerdo será por 30 años (renovable por el mismo período si “se cumplen las expectativas”) por un monto total de U$D 150 millones, que representan U$D 5 millones por año, según pudo saber Doble Amarilla. Esta suma ya fue desembolsada por el empresario, tal como confirmó Tofoni, pese a que los socios no dieron la aprobación final.
Un dato no menor es que, en cualquier momento de estos 30 años que dura el acuerdo, Foster Gillett puede “abrirse” de la Sociedad y vender su parte a cualquier otro empresario y/o grupo (que cumpla los requisitos), por lo que nadie puede garantizar la permanencia del magnate estadounidense hasta la finalización del contrato con el club.
Además, aseguran que se tratará de un acuerdo en el cual Estudiantes no pondrá absolutamente nada en garantía y que será circunscripto, solamente, al área fútbol. “A Foster no le interesa nada más que el fútbol de Estudiantes”, aseguran a Doble Amarilla fuentes vinculadas al acuerdo. Por este motivo, el fútbol del “Pincha” (enlgoba el femenino, masculino y las divisiones juveniles) pasará a ser una Sociedad Anónima Deportiva en la cual el club será propietario, en principio, de un 20% y el otro 80% de todos los activos serán del ”Grupo Gillett”. No obstante, desde el club intentan disminuir esa brecha, por lo que aún no se terminan de poner de acuerdo en este punto y es el que termina dilatando la presentación del convenio, la cual estaba pactada para el 15 de diciembre. El objetivo era cerrarlo antes del mercado de pases y traer incorporaciones fuertes para jugar el torneo internacional este 2025.
Al no poder firmarse antes del inicio de la ventana de transferencias, Gillett ejecutó la cláusula de U$D 15 millones por Cristian Medina y se lo cedió a Estudiantes, “como un gesto de buena voluntad hacia Verón”, aseguran. Sin embargo, la letra chica del trato entre partes indica que, en caso de que los socios voten por la negativa en Asamblea y se “caiga” el acuerdo, inmediatamente Gillett se llevará a Medina (como al resto de los jugadores que lleguen, a través de él, en este mercado) a otro de los clubes que pertenencen al “Grupo Gillett” y Estudiantes deberá devolver el dinero que recibió por parte del empresario.
Lejos de enfocarse solamente en el fútbol argentino, Gillett desembarcó en Argentina con su portafolio de negocios y las charlas con el Gobierno Nacional son permanentes, funcionando Guillermo Tofoni como intermediario de ambas partes. Si bien aún no hay convenios firmados, el empresario dejó en claro que su objetivo es adentrarse en el sector de infraestructura.
El primer paso será la aprobación del acuerdo con Estudiantes y, luego, avanzarán las negociaciones con el propio Javier Milei para la inversión a nivel nacional, según le confiaron a Doble Amarilla.
A poco más de un mes para la aprobación final del acuerdo con el “Pincha”, dentro de la propia Comisión Directiva hay descontento por la falta de claridad al respecto. Si bien hubo pedidos para que el mismo pueda debatirse y, eventualmente, aprobarse mediante Asamblea antes del mercado de pases, esto no ocurrió. De esta manera, sumado a las recientes declaraciones en las que se publicita, tanto desde el Gobierno como por los representantes del empresario, como la primera SAD, las dudas y el ruido interno crecen.