Si había alguien que estaba molesto en la noche tucumana, ese era Gustavo Costas. El director técnico de Racing tuvo dos últimas presentaciones con su equipo por demás decepcionantes. Su plantel tiene una superioridad que avasalla a varios de la Liga Profesional de Fútbol. Sin embargo, no logra hacer que eso se vea en el marcador final. 

Le ocurrió ante Independiente, en superioridad numérica durante 70 minutos, y le ocurrió en la derrota ante Atlético Tucumán, en un partido en el que se pudo poner a tiro de la punta y no hizo más que desperdiciar (otra vez) una buena chance."Los partidos decisivos los tenés que ganar. Nos falta esa intensidad y correr cada pelota como si fuese la última. Tenemos que volver a las raíces de cuando empezamos", se descargó el entrenador en sintonía con lo dicho por Gabriel Arias.

En el primer tiempo podríamos habernos ido ganando. Ellos tuvieron una chance y nos embocaron, nosotros tuvimos cinco chances y fallamos”,expresó Costas en una conferencia de prensa que fue muy breve.

El director técnico de la “Academia” marcó. “El gol vino por un error nuestro, no nos llevaron por delante. En el segundo tiempo tuvimos más chances, pero perdimos la intensidad. Debemos recuperar las ganas, el pelear cada pelota como si fuese la última”, protestó. Vienen por delante varios días de trabajo sin partidos por los puntos en el medio, por los que Gustavo Costas deberá volver a conectar  a su equipo consu mejor versión. 

La recta final del año le tiene preparado un doble cruce ante Atlético Paranaense, por los cuartos de final de la Copa Sudamericana, pero antes tendrá una prueba de fuego cuando enfrente a Boca y ante su gente. Este equipo, po obra propia, se quedó sin margen de error