La banda de Rock Nacional “Los Piojos” brindará una serie de recitales en el Estadio Único de La Plata y generó polémica, ya que le otorgó los servicios de seguridad a la barra de Estudiantes, que se hará cargo de un negocio que ronda los $300 millones.

Un sector vinculado a la UOCRA y a la barra de Estudiantes presionó para quedarse con el operativo de seguridad: se trata del Sindicato Único de Seguridad de la República Argentina (UPSRA) un armado que tiene como referente a Miguel Tobar, hermano de Iván Tobar, jefe de la UOCRA en La Plata y líder de Los Leales, la pesada del club Estudiantes, según informó el portal “La Política Online”.

Durante semanas, Tobar presionó para quedarse con el millonario operativo de seguridad de los siete shows que la banda de Ciro Martínez dará en la capital provincial. La empresa Trescientos Productora SA cedió a las presiones del gremio que contaba con el respaldo del ministro de Trabajo bonaerense, Javier Correa, y su par de Seguridad, Javier Alonso.

La barra de Estudiantes se encargará de la seguridad de los shows de Los Piojos a cambio de $300 millones

Además, sostienen que el Ministro de Trabajo bonaerense los rechazó en primera instancia, pero luego les dio lugar y armó una conciliación obligatoria. Quien regula a las empresas de seguridad en la provincia es la cartera que conduce Alonso a través del Recap. En tanto, la cartera de Trabajo es quien controla que el personal no esté en negro.

Según informó LPO, la productora de Los Piojos terminó aceptando a los Tobar en el esquema de seguridad. Se estima que van a contratar a unas 1.000 personas que cobrará unos $36.000 por cada uno de los shows. Además, cada sindicato cobra un plus por llevar trabajadores a los shows. Es un negocio que ronda los $300 millones.

Los Tobar también le exigieron a la productora que contrate una sola empresa y reclamaron unas 200 entradas por show para reventa.

Antecedentes de seguridad que no utilizaron el personal de seguridad adecuado

Existen antecedentes de shows históricos que terminaron en tragedia por no utilizar al personal de seguridad adecuado. El caso con mayor trascendencia fue el recital de los Rolling Stones en Tracy, California.

Allí, la banda de Mick Jagger contrató a los Hell Angels, un grupo de motociclistas violentos que convirtieron el festival en pesadilla. Hubo incidentes durante todo el show. 

Un total de cuatro personas murieron, entre ellas Meredith Hunter, de 18 años, que fue apuñalado cinco veces por un miembro de los Hells Angels. El desastre es considerado como el fin del movimiento hippie.